Ana Kraš, la artesanía que triunfa

Diseñadora de muebles, fotógrafa, artista… La bella Ana Kraš, nacida en Belgrado e instalada en Nueva York, nos abre las puertas de su bucólico estudio en el East Village.

Cuéntanos un poco más de ti. Naciste en Belgrado y estudiaste allí, ¿verdad?
Sí, crecí en Serbia y estudié Diseño de Interiores en la Universidad de Artes Aplicadas de Belgrado.

Y después, te mudaste a Estados Unidos. ¿Cuánto tiempo llevas viviendo en Nueva York? ¿Qué es lo que más te gusta de la ciudad y qué te inspira?
Primero pasé un tiempo en Los Angeles, antes de mudarme a Nueva York, donde llevo viviendo un año y medio más o menos, aunque la mitad del tiempo lo he pasado fuera viajando, así que todavía es bastante nuevo para mí. La verdad es que nunca planeé vivir en Nueva York pero aquí estoy, aunque todavía no estoy loca por la ciudad como le ocurre a mucha gente. Estoy conociéndola poco a poco.

¿Qué es lo que más te gusta de la ciudad y qué te inspira de ella? 
Es una ciudad de estilo más europeo, así que me resulta más familiar que el resto de Estados Unidos y lo que más me inspira es la gente que vive aquí, llena de talento y creatividad. Este año intentaré viajar algo menos y así tratar de conectar con la ciudad.

¿En qué zona vives? ¿Qué podrías recomendar de esa parte de la ciudad?
Vivo en el East Village, una zona que me encanta y donde están algunos de mis restaurantes japoneses favoritos como Hasaki, Soba Ya o Robataya.

Háblanos de tu trabajo como diseñadora. Creo que las lámparas bonbon son tu creación más conocida. 
Sí, son el proyecto más popular entre la gente, son originales y están hechas a mano por mí. La idea surgió hace unos cinco años cuando creé la primera lámpara, después la llevé a una de las ferias de muebles más prestigiosa de Milán y a partir de ahí empecé a hacer pequeñas ediciones cada poco tiempo.

¿Qué más diseñas?
Hago todo tipo de muebles –sillas, mesas…–. Algunos son pedidos que la gente realiza y otros son creados por mí directamente.

¿Qué tipo de materiales usas? ¿Dónde puede la gente encontrar tus creaciones? 
Uso madera, metal, todo tipo de telas… Me gusta utilizar una gran variedad de materiales. En este momento los objetos que creo sólo están disponibles por pedido, pero justamente estoy trabajando en cambiarlo y con suerte, a finales de este año, se podrán encontrar pequeñas ediciones de diferentes objetos en algunas tiendas y en Internet.

¿Cómo describirías tu trabajo, tu estilo? 
Muy relajado, quizás demasiado relajado en ocasiones. Intento comenzar siempre con pequeños bocetos y así disfrutar de todo el proceso de creación. También trato de no pensar demasiado. Soy muy flexible y como me gustan muchas facetas del proceso creativo y muchos estilos, no puedo ser demasiado estricta con el resultado. Creo que todos los objetos son bellos en su propia forma.

¿Podrías recomendar alguna tienda de muebles o decoración que te guste especialmente en Nueva York?
Matter, es simplemente preciosa.

Además de como diseñadora de muebles, también has trabajado como fotógrafa. ¿Es algo que sigues haciendo? ¿Qué te gusta fotografiar? ¿Qué tipo de cámara usas? 
Todavía trabajo de vez en cuando como fotógrafa, aunque mayormente hago fotos para mí, porque me gusta. Mi tema favorito son las personas cercanas a las que capturar cuando no se dan cuenta de mi presencia. Suelo utilizar diferentes cámaras analógicas, pero nunca uso digital. No me emociona el hecho de poder ver la imagen inmediatamente. Prefiero olvidarme de qué he fotografiado y luego llevarme una sorpresa al revelar el carrete y ver las fotos.

¿Te interesa la moda? 
No me interesa en cuanto al concepto pasarelas y revistas de moda, tendencias…, pero sí me gustan las formas, colores y telas, que es en lo que realmente consiste la moda. Estaría muy interesada por ejemplo en colaborar con una firma de moda y diseñar prendas o crear una paleta de colores o algo por estilo, porque para mí esa es la forma de aproximarme a la moda, como una forma de arte más. En la actualidad la producción de prendas es tan rápida… es demasiado y considerando lo poco que realmente necesitamos, es una tragedia y un desperdicio. Es muy triste ver cómo la gente siempre quiere lo último y nunca están satisfechos con lo que tienen, cuando la ropa en realidad no cambia nada en sus vidas.

¿Cómo describirías tu estilo al vestir?
Creo que es una mezcla de todo, aunque podría decirse que es elegante y cómodo. En invierno solo quiero estar a gusto por lo que suelo llevar jerséis de cashmire y pantalones de lana. ¡Bastante aburrido la verdad! Cuando el tiempo mejora, llevo todo, desde vestidos de estilo folk, hasta trajes azul marino de hombre o prendas de estilo pijama. La verdad es que no puedo pensar en una sola prenda que no me pondría.

¿Tienes alguna prenda en tu armario que te guste especialmente?
Hay muchas a las que estoy unida por diferentes razones. Tengo un jersey de color ladrillo que me hizo mi abuela, por ejemplo, un jersey de mi novio que encogí al lavarlo en la lavadora… Mis zapatos favoritos son unas sandalias de ante que me regaló mi amiga Maryam Nassir Zadeh y que diseñó ella misma. También me encantan mis pantalones de pijama de satín de color rojo que compré en Estocolmo por 2 euros.

Has sido parte de la campaña de la firma francesa The Kooples con tu pareja. ¿Cómo fue la experiencia? (Ana es pareja del músico y artista americano de padres venezolanos, Devendra Banhart). 
La firma está dirigida por una familia adorable y fue un placer trabajar con ellos.

¿Cómo es vivir con alguien que también es artista? ¿Os inspiráis mutuamente o necesitáis vuestro propio espacio para crear?
Sin duda necesitamos nuestro propio espacio. Creo que es importante para cualquier pareja no estar siempre encima del otro, aunque por otro lado también nos inspiramos y creo que es una razón muy importante para estar con alguien, el que te inspire de alguna manera. A veces dibujamos o pintamos juntos… Es lo mejor de tener intereses comunes.

He leído que conociste a Devendra mientras le fotografiabas para una revista y que fue amor a primera vista. ¿Cómo fue para ti ese momento?
Puede decirse que mis pies estaban congelados y que él tenía un estupendo par de calcetines para dejarme.

Has estado viajando mucho en los últimos meses. ¿Qué lugares te han gustado más? 
He estado en Baru, Colombia, donde la selva es simplemente increíble. Del resto de lugares en los que he estado en los últimos años me encantan Japón, California, México, Grecia…

¿Qué suena en tu reproductor últimamente?
He estado escuchando mucho a una banda llamada Woo, que me recomendó un amigo.

¿Qué haces para relajarte? 
Me doy un baño, pinto, dibujo…

¿Algún proyecto en el que estés inmersa ahora mismo? 
Pues estoy trabajando en un libro de fotografías y en algunos proyectos de muebles nuevos, pero con lo que más contenta estoy es con un encargo de una escultura que estoy a punto de comenzar.

De momento, los trabajos artesanos de solamente pueden adquirirse por pedido, aunque a finales de este año será posible comprarlos vía Internet.

Por Ana Valls
Fotografía Joana Redondo Santos