Lleva toda la vida metida en la interpretación -además literalmente-, pero Carla empieza a recoger ahora todo lo que un día sembró…
Imagen: Carla Campra x Noah Pharrell. Top de Fórmula Joven
Imagen: Carla Campra x Noah Pharrell. Top de Fórmula Joven
Lleva toda la vida metida en la interpretación -además literalmente-, pero Carla empieza a recoger ahora todo lo que un día sembró…
Con ‘Feria: La luz más oscura’, la de Barcelona se ha coronado como una de las actrices patrias con más proyección, título que impulsa con los otros estrenos que tiene pendientes y que, al fin, verán la luz este 2022: ‘Sagrada Familia’, de Manolo Caro para Netflix, ‘La niña de la comunión’ dirigida por Victor García para Atresmedia, y la película ‘Tras el reflejo’, de Frank Ariza.
¡A volar alto, Carla!
Ha sido un viaje. Sofía es el personaje más complejo que he interpretado hasta el momento. Es una niña que tiene mucho mundo interior, que no exterioriza tanto, que tiene una manera de ser, de comportarse y de querer bastante alejada a la mía. Además, la situación que está viviendo en la serie es muy fuerte y está todo el rato asustada, triste… sufre todo el rato. De alguna manera ha sido muy duro, pero a la vez muy gratificante. Sofía me ha enseñado cosas de mí misma que no sabía.
Yo soy muy kamikaze en mi vida. Me crié subida a los árboles todo el día… entonces me gusta mucho la acción. Me gusta tener que correr, saltar, caerme… Me encanta. Y el terror tiene mucho de eso. Es verdad que también es agotador, pero me siento muy cómoda en el drama y el terror en general. Sin embargo, también te digo que ahora mismo me apetece enfrentarme a una comedia, algo más ligero, que no me suponga tanta carga mental.
En el caso de ‘Feria’, realmente yo me enfrentaba a todas esas secuencias desde Sofía. El trabajo que hice con ella fue conocerla, saber cuáles eran sus gustos, sus aficiones, lo que le gustaba, lo que no le gustaba, su corporalidad, cómo se movía, cómo miraba… Entonces, al conocer todo eso, enfrentarme a una escena de mucho drama emocional, me sale solo, porque los sentimientos de Sofía hacia su madre, hacia su padre, hacia su hermana, ya estaban dentro de mí de lo mucho que había empatizado y lo mucho que amaba a Sofía.
Realmente sigo sin saber quién soy, pero creo que es algo que no solo nos pasa a los actores. De hecho, me da la sensación que un actor, al jugar con sus emociones y ponerse en la piel de otras personas, se va conociendo más a sí mismo.
En mi caso, ya te digo, sigo en la búsqueda. De hecho, llevo yendo a terapia dos años y para mí es muy importante porque me dedico a lo que me dedico y tengo que saber cuáles son mis herramientas, conocerlas bien y saber jugar con ellas.
Por otro lado, el hecho de trabajar desde tan pequeña me ha hecho crecer junto a mucha gente adulta, conocer cosas antes de tiempo… Me ha venido muy bien ser la pequeña del grupo siempre (risas).
Sí, sí, sí, muchísimo. Por ejemplo, si me tenía que enfrentar a escenas complicadas, confiaba más yo en mí misma que el equipo. O sea, se preocupaban mucho de que me las preparara con la coach y yo en el fondo decía: ¿por qué? Me creaba más conflicto el hecho de ver que “no me veían capaz”. Eso me ponía en la tesitura de pensar: a lo mejor la escena es más complicada de lo que siento, cuando a lo mejor es algo que me podía salir más natural.
También es un momento complicado porque estamos viviendo una pandemia, una guerra aquí al lado… Entonces todas las medidas que se toman son para proteger a la sociedad, cosa que está bien, pero a la vez, la gente joven y los niños, no están teniendo la infancia y la adolescencia que una persona necesita. Están acostumbrándose a echarse hidrogel en las manos todo el rato, a ir con media cara tapada, a no poder acercarse a la gente y eso condiciona mucho. Al final son edades en las que tienes que vivir muchas cosas y no por desarrollarse libremente pasa factura.
Por eso para mí es tan importante la terapia. Ni el que tenga la vida más fácil se salva en realidad. Todo el mundo lidia con ciertos problemas, traumas, y es muy importante conocerlos. Es muy sano.
Las redes son muy importantes, sobre todo como escaparate para promocionar nuestro trabajo. Lo que es cierto que también pueden ser muy perjudiciales… Yo me daba cuenta de que, a veces, estaba en el sofá de mi casa haciendo ‘scroll’ en Instagram y me sentía mal al ver que la gente estaba haciendo cosas.
Eso hacía que dejara de valorar lo que tenía para compararlo con lo que tenían los demás. Y esto es un pensamiento súper dañino. Por eso me quité las redes sociales, para dejar de estar pendiente de la gente y aprender a valorar lo que tengo.
‘Sagrada Familia’ ha sido un rodaje precioso porque he conocido a gente a la que me llevo en mi corazón. Creo que pasa en muchos rodajes, pero no en todos. Además, he compartido escenas con gente a la que admiro y que llevo mucho tiempo viendo en proyectos, en películas… He compartido mucho con Najwa. Ella es maravillosa. Ha sido una gran compañera conmigo.
No te puedo contar mucho, pero mi personaje tiene un conflicto tremendo en su interior… Ya te digo que al final con el drama es con lo que más cómoda me siento (risas). Lo disfruto como un enana.
Este último año he tenido mucho trabajo, pero he tenido la suerte de que no se me ha solapado ninguno. He podido salir de uno, tener un pequeño descanso, y entrar en otro. Sin embargo, ahora que he parado más tiempo, me doy cuenta de que estaba muy agotada emocionalmente. Y encima pasa algo muy curioso porque, cuando estás rodando no te pones malo nunca, pero termina el rodaje y te viene todo (risas).
Cuando terminé ‘Sagrada Familia’ no tenía trabajo previsto… y jope, esto asusta un poco… así que yo ya me estaba planeando hacer algún curso o irme al extranjero un tiempo, no sé, moverme… y justo me salió esta película, y encima de un director con el que, solo en las pruebas, ya he aprendido muchísimo.
Es un hombre muy sabio y se le ve. Para mí, que Jaime Chávarri haya decidido darme la oportunidad de participar en esto es un regalo. Además me apetece mucho porque va a ser algo divertido, ¡que ya me toca!
Fíjate, creo que espero tranquilidad. No como tal, sino emocional. Para mí es lo más importante. También espero que me dé cosas bonitas, que me enseñe, que me haga conocer a gente que me aporte y, sobre todo, que se valore el esfuerzo que he puesto en todos los proyectos que están por salir.
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Texto: Anna Alarcón @_annalarcon
Fotografía: Noah Pharrell @noah_pharrell
Estilismo: Ona Goeree @onagoeree
Maquillaje y peluquería: Sandro Nonna @sandrononna
Asistente de fotografía: Ale Cubino @alecubino
Retoque: Ana Simón @ana_simon_rt