«DTMF»: Un grito de lucha de los puertorriqueños

Después de un sencillo que mediáticamente pasó sin pena ni gloria como fue «EL CLúB», el lanzamiento de «PIToRRO DE COCO» supuso la primera mojada de labios con lo que había preparado la ya figura de la cultura pop global. La primera escucha de «DTmF» supone una experiencia diferente. En este disco que abarca temas como la nostalgia o la gentrificación masiva de Puerto Rico, Bad Bunny se atreve a tocar más de 20 géneros diferentes en los que se desenvuelve a la perfección.

Analizamos «DTMF»,  el último álbum de BAD BUNNY

Introduciendo el disco con «NUEVAYoL», que quizás no mete al oyente en el concepto del disco pero sí es un registro muy disfrutable y divertido, el tracklist presenta 17 canciones y una duración de poco más de una hora. Destacan grabaciones como «BAILE INoLVIDABLE», con seis minutos de duración, que gracias a su intro celestial acompañándose de unas trompetas en ascendencia, recuerda mucho al Bad Bunny de «EL ÚLTIMO TOUR DEL MUNDO». Cuando el beat cambia y entra a salsa nos encontramos uno de los primeros acercamientos del disco al folklore músical puertorriqueño que está ejecutado a la perfección y no tiene nada que envidiar a los registros más famosos de Willie Colón.

La variedad del disco también incluye tracks más poperos en él, cómo es el caso de «WELTiTA», que presenta al grupo puertoriqueño Chuwi, que se suman a Omar Courtz, Dei V, RaiNao y Los Pleneros de la Cresta como los únicos featurings del proyecto, que comparten en común su origen boricua. Al track de Omar Courtz y Dei V (con mención de Wisin incluida) hay que darle su espacio, ya que huele a hit comercial del verano (en Puerto Rico y en todo el hemisferio sur es verano). La intro de Dei V es de los mejores momentos del disco y los versos de Benito y Courtz dejan un poco que desear al no ser ni mucho menos el nivel que pueden aportar ambos.

Volviendo a mencionar «EL ÚLTIMO TOUR DEL MUNDO», «TURiSTA», una de las grabaciones más nostálgicas y tristes del disco, recuerda a ese Bad Bunny más melódico que tanto gusto en tracks como «TRELLAS». Acompañando la caída de ánimos que comienza con esta, llega «LO QUE LE PASÓ A HAWAii». Abre el Genius y reproduce la canción en tu plataforma favorita, porque estás a punto de escuchar una clase de historia sobre la explotación turística que sufren muchos paraísos como la mencionada Puerto Rico, Hawaii o nuestras Islas Canarias entre otras. Lo más bonito de esta canción no es la música en sí, que transmite a raudales, pero solo es la banda sonora de lo que ha supuesto uno de los movimientos revolucionarios más grandes vistos en redes sociales provocados por música latina en los últimos tiempos.

Miles de vídeos de puertorriqueños mostrando como en sus queridas playas los hoteles y complejos turísticos han ganado el terreno a la naturaleza y los accesos a las playas públicas se han vuelto toda una yincana. El verdadero valor de los discos reside en lo que generan a las personas. La música es subjetiva y cada uno puede darle su propia interpretación, tomar los mensajes que se cantan como suyos o no escucharla porqué no los comparten. Puede que dentro de un año «VeLDÁ» o «PERFuMITO NUEVO» dejen de sonar en las radios y en las discotecas, pero «LO QUE LE PASÓ A HAWAii» seguirá siendo un grito en las manifestaciones de las tierras reprimidas por la explotación turística y será una piedra más en la historia del pueblo puertoriqueño, que se niega a darse por vencido.

Cuando es capaz de generar un movimiento tan grande con un disco dedicado a su tierra, es innegable aceptar que Bad Bunny es uno de los artistas latinos más grandes de todos los tiempos. Alejándose de lo comercial de «Un Verano Sin Ti» y del trap de «nadie sabe lo que va a pasar mañana», «DeBí TiRAR MáS FOToS» consagra a Bad Bunny como algo más que un reggaetonero o una estrella del pop. Es un artista con todas las letras de la palabra y

el valor que ha aportado y sigue aportando su música a la cultura latina, no solo como entretenimiento sino como voz de una generación que vive a la sombra de la propaganda yankee, es de un valor incalculable.

Dani Curbelo: @ssaintdanii

Imágenes: YouTube e Instagram