Que tiemble Cenicienta porque este verano la van a salir competidoras por todas partes. El último grito en calzado no sólo nos convierte en princesas con “zapatitos” de cristal, además nos transforma en auténticas ilusionistas haciéndonos levitar por las calles de la ciudad. Suelas y tacones desaparecen (no literalmente) dejando nuestros pies flotando a unos centímetros del suelo. El pexiglás se ha propuesto convertirse en el material tendencia esta primavera y ¡lo ha conseguido! Bolsos que guardan pero no esconden, pantalones de Loewe que forran nuestras piernas sin velarlas lo más mínimo y ahora tacones de hielo que no se derriten con el calor. Esculturas de cristal en nuestros pies que además crean un sorprendente efecto pierna infinita. Si Valentino en 2013 ya nos sacaba a pasear en un falso efecto pies descalzos ahora son Loewe y Dolce & Gabbana entre otros quienes se han propuesto vestir nuestros pies de plástico con zapatos de pseudo-cristal (eso sí irrompibles y capaces de resistir una buena caminata y hasta un taconeo). Suelas y plataformas tan claras como el agua, PVC a todas horas y en todos los rincones de nuestra vida. Los zapatos clásicos y las plataformas opacas tienen los días contados , la tendencia más artificial convierte las calles en un ir y venir de pies flotantes. En versión zapato invisible dejando al descubierto unos pies que más nos vale llevar perfectos, o solo con el tacón transparente. Sea como sea nos olvidamos de betún, cera y cepillo , ahora limpiamos nuestros zapatos con limpiacristales y abrillantador. Los ugly shoes seguirán provocándonos ese ya recurrente amor-odio que nos hace incondicionales a ellos pero este verano todas preparadas para cantar al unísono ¡Life in plastik is fantastic! Eso sí, su material plástico no esconde detalle alguno así que más nos vale que nuestra pedicura esté literalmente de pase de revista, aquí te dejamos algunas direcciones para una ayudita de última hora en temas de pedicura.   Mercedes Gala