¿Por qué los hombres tenemos tanto miedo a experimentar en cuestión de tendencias, a romper mínimamente los cánones establecidos? La moda ha encontrado en las féminas a sus mayores cómplices: Cortamos un poco por aquí, elevamos otro poco por allá, pintamos los labios tal que así... No es de extrañar que una tienda de cuatro plantas destine tres de ellas al siempre dispuesto a todo género femenino. Ellas, que han lucido melenas para después sacrificarlas por una tal pixie, que han abierto los armarios de sus abuelas en busca de algo vintage todavía no comido por las polillas... Ellas son pioneras absolutas. El hombre, en cambio, ¿en que ha cambiado? Pensad en vuestros padres. Ahora en vuestros abuelos. ¿Y bien? Color, corte, inspiración... Qué se han dado variaciones es algo evidente, pero siempre cumpliendo unos arquetipos que como mínimo deberíamos de pulir. "Si se exuda masculinidad, no hay que temerle al rosa", sentenciaba un Alfie perfectamente interpretado por Jude Law en la famosa cinta del 2004. ¿Qué tendrá el rosa de distinto para temerle tanto? En Vanidad, agarrándonos como excusa a la reciente fotografía del grupo Deerhunter usando falda de Proenza Schouler hemos querido hacer apuesta. Apuesta por un hombre masculino y con confianza que no piensa en el qué dirán. Los hombres también pueden llevar falda.    Alejandro Bernad Perié

También te puede interesar