Nos trasladamos a una época épica, perdón por la rima, pero si hay una tendencia que nos emociona especialmente por su
influencia en la historia de la moda más underground esa es sin duda la de los mods. Al ritmo de los Who volvemos a disfrutar de los
zapatos de cordones, las lineas depuradas y ese deseo de una chavalada problemática que algún día amo la moda de tal manera que cambiarón sus vidas y más tarde las de nuestros padres y hace unos años regresarón haciendo lo mismo con las nuestras. Recordamos l
as chapas, los tirantes, las boinas, los cuellos altos con americana y su prenda insignia, la parka.
Hominem traslada el mundo de "Quadrophenia" a la pasarela del Teatro Circo Price y se marca un remember en toda regla transformando la bandera mod (aquella diana en azul, rojo y blanco) en un cuadrado coronado por su mismo nombre.
Como ya hizo el mítico grupo, hablamos de nuestra generación, ésta a la que le entusiasma el buen vestir y a la que la firma hace honor.
Granates, verdes, azules, black & withe, nada chirriante, siempre sofisticado, como si la necesidad de devolvernos la seductora elegancia de los cortes italianos sesenteros se apoderara de una firma que ha sorprendido gratamente dejando a los asistentes con ganas de montarse en las Vespas que aguardaban a las puertas del desfile cantando a gritos "I Can"t Explain!".
Los mods han vuelto, nosotros estamos encantados, tenemos preparados nuestros chicles, los polos, las camisas de cuadros, los pantalones de traje más entallados y nuestros mejores pasos de baile. Homimen nos ha recordado que todo vuelve y si hay calidad más y mejor.
Os dejamos con un pedacito de lo que puso banda sonora a los looks de Hominem y que debemos tener claro será nuestro sello antes de plantarnos la versión en zapato de Dr Martens. Larga vida a los mods.
Lucía Fernández Alonso (
Luceral)
También te puede interesar