Simplemente auténticas, inimitables. Nunca has visto nada igual. Ésa sería sin duda la descripción más certera del objeto de deseo que nos ha robado el corazón. El estilo y la sastrería italiana, se unen a los colores y la fuerza de Haití en unas prendas de maravillosa singularidad; esta semana las faldas de Stella Jean son nuestra nueva obsesión.
Como si de un lienzo se tratara, sus tintes y las vibrantes impresiones de estas piezas, realmente convierten cada falda en toda una obra de arte, ¿alguien se resistiría a vestir arte?
No se trata de prendas con “algo” especial, se trata de faldas extraordinarias en sí mismas, el tipo de piezas que parecen hechas sólo para algunas mujeres, aquellas capaces de defenderlas (no solo de vestirlas), mujeres muy seguras de su estilo, de su personalidad, mujeres con genio, con garra, mujeres como Rihanna, Beyoncé o la excepcional Viviana Volpicella que ya se han dejado cautivar por sus encantos.
Quizás por eso su propia diseñadora se ha convertido en su mejor embajadora, Stella Jean, marca, se basa en Stella Jean, persona. Multicultural, optimista, ella misma es el equilibrio perfecto entre ese estilo único de los milaneses y la fuerza racial de su herencia criolla.
Con esa mestizaje perfecto ha creado una marca indudablemente reconocible, cada una de sus faldas parecen tener vida por sí mismas; piezas para vestir en días grises y salir a la calle sintiéndote capaz de cambiar el mundo, o al menos de pegarle un buen mordisco.
Merecida ganadora de uno de los concursos más prestigiosos de nuevos talentos de la moda: Vogue Italia talent contest Who Is On Next 2011, ha sido capaz de defender la identidad de su firma y de sus diseños creando esa fabulosa armonía entre artesanía italiana y espíritu audaz caribeño.
Además, el compromiso de la diseñadora con sus raíces no se limita al estampado de sus diseños, Jean colabora con el International Trade Centre (ITC) de las Naciones Unidas y su iniciativa sobre moda ética, que aboga por un trato justo y ético de los centros de manufacturas en países en vía de desarrollo.
Nadie mejor que ella misma para transmitir el mensaje que plasma en cada una de estas faldas, que a nosotras nos quitan el hipo; decía Stella Jean: “Quiero comunicar a través de la ropa un concepto de mundos y tradiciones opuestas pero fusionados de una manera sofisticada”.
¿El resultado? Fuerza, raza, color, carácter, personalidad... Y todo ello en unas faldas de fábula. ¿Aún alguien se resiste a ellas?
Ana Horcajo @anii_horcajo