Hoy nuestro objeto de deseo comienza como los cuentos infantiles: Había una vez , hace mucho tiempo (más de 150 años), un niño de 14 años que decidió salir de su pequeño pueblo en las montañas francesas (Anchay) para ir caminando hasta París. Cuenta la leyenda que en el camino aceptó todo tipo de trabajos para poder continuar hasta su destino. Cuando llegó a la Ciudad de la Luz comenzó a trabajar de aprendiz en una fábrica de cajones… Así podríamos continuar la historia, hasta que este visionario chiquillo fundó una de las marcas más poderosas, exitosas, imitadas y reconocibles de la industria de la moda. Consiguiendo la confianza de personajes como la Emperatriz Eugenia, el gran Duque Nicolás, el edil de Tokio, Goto Shojiro, el sultán otomano Abdülhamid, y todo Hollywood, empezando por el actor americano Douglas Fairbanks. Para los que aún no lo han adivinado el protagonista de nuestra historia no es otro que Louis Vuitton. Dando un salto en el tiempo volvemos al siglo XXI, en un momento cumbre de la historia de Louis Vuitton como el que vivimos, con el absolutamente maravilloso e impecable giro que Nicolas Ghesquière ha supuesto para la casa francesa, nuestro interés por su historia, su origen y su pasado es cada vez mayor. Pocas firmas pueden presumir de llevar a sus espaldas  (o quizás guardada en maravillosos baúles) tanta historia y tantas historias, además de un savoir faire inimitable, y de ser sin ninguna duda una absoluta leyenda e institución del mundo de la moda. Adoramos las creaciones de Ghesquière, sus pantalones flare up, sus botines monogram, sus mini faldas y vestidos seventies, pero hemos de reconocer que por encima de todos ellos Louis Vuitton es viaje, baúles, es lona estampada en maletas de ensueño con las que podríamos viajar sin equipaje porque parece que llevándolas ya tienes todo lo imprescindible. Maletas que esta semana queremos preparar para un único destino, porque no nos quitamos de la cabeza un viaje, queremos ir a Francia, muy cerca de París, queremos ir a Asnières y allí, directos y sin perder ni un minuto a una visita mágica, un viaje por la historia de Louis Vuitton o lo que es lo mismo, un viaje por la historia del viaje, vamos a visitar La Galerie Louis Vuitton, el corazón histórico de la firma. A la vez casa de la familia, cuna de la artesanía, fuente de inspiración y creatividad, museo y archivo. 23.000 objetos, 165.000 documentos incluyendo 110.000 registros de clientes… Definitivamente no podemos posponer nuestro viaje, preparamos los baúles porque el objeto de deseo de esta semana es sin duda un viaje a Asniéres, un viaje al alma de Louis Vuitton, de sus artesanos, de sus clientes, de los artistas que forman parte de la vida de la firma. Baúles que parecen sacados del Orient Express, cajas para sombreros propios de los años 50 , los primeros maletines, las primeras bolsas flexibles... Y todo ello salpicado con las creaciones de los últimos directores creativos , Ghesquière, Kim Jones y Marc Jacobs, todo ello en un ambiente que huele a viajes, a historias, a manos únicas… La posibilidad de estar en la cuna de Vuitton, donde además se siguen fabricando pedidos especiales, bolsos de pieles exóticas, ediciones limitadas y piezas para los desfiles. ¿Quién puede resistirse a esta visita mágica?                     Prepara tu equipaje porque este viaje va a ser muy especial. Ana Horcajo @anii_horcajo

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