Nos despedimos de la XIII Edición de Valencia Fashion Week con un repaso a sus tendencias en belleza. En general, beauty looks que sorprenden y arriesgan poco... Se impone la simplicidad, el clasicismo y vemos una repetición de técnicas, coloridos y acabados vistos en temporadas anteriores. La presencia del look lady con un punto sofisticado pero exento de riesgo toma forma en las propuesas que marcan el labio rojo frente a una piel despejada y limpia con el pelo lacio en altas colas de efecto mojado o altos cardados. Los ojos pierden protagonismo frente a las gafas de sol. El aire romántico y la delicadeza de las bailarinas se materializa sobre la pasarela con pieles nude, despojadas de todo artificio pero resplandecientes, rematadas en moños altos de formas puras. Una tendencia que se recupera en varios desfiles de Valencia es el look folk construido sobre trenzas que se recogen en lo alto de la cabeza (ya lo vimos, más racial en Maya Hansen) Aquí, la piel palidece para dejar todo protagonismo al peinado, con permiso de unos ojos multicolor de eye-liner rosa y plata. Por otro lado, la propuesta del trenzado tiene una versión más 80"s, con un toque nerd de instituto que resulta divertido. Amplias trenzas que se deshacen levemente con el gesto de poner/quitar las gafas. Como contrapunto sexy, los labios suben de tono. Retorno del look de los 90. Años de moños deshechos y ojos ahumados... Pero siempre sobre pieles muy pulidas y despojadas del tono que se esperaría del verano. Como contraste, infinitas pestañas sobre piel mate que luce impecable bajo ondas desechas. Parece como si el paso del folk trenzado a la simplicidad del liso se depurara en este look cercano a la imagen de las super-tops de aquellos maravillosos años. Por Lucía Pardavila (@soylua)