No hace muchos años el atuendo estándar de una mujer elegante incluía de forma cuasi obligatoria cubrirse la cabeza, ya fuera con tocados, sombreros, pañuelos o arreglos, dependiendo de la moda vigente. Desde hace unas temporadas, las pasarelas parecen indicar esa vuelta a la ornamentación, más que por un signo de modestia como antaño, por mera estética. Beanies, fedoras, pamelas... el sombrero ha vuelto a reinar en el street style. Y de paso se ha traído consigo los accesorios capilares. Motivos decadentes para ser una auténtica romántica; flores bucólicas para convertirse en una nueva virgen prerrafaelita; diademas brillantes para vivir los locos años 20; delicados lazos para volver a la infancia, horquillas old school... Todos ellos vuelven, con gran fuerza, para dar brillo y esplendor a todo tipo de peinados. Así lo constatamos en las propuestas para el otoño-invierno de este año. Están por todas partes, independientemente de la largura y textura del cabello, y tenemos veinte propuestas de accesorios para demostrártelo. Te aseguramos que acabarán convirtiéndose en tan imprescindibles como lo era el mítico pasador de Margot Tenenbaum. Echa un vistazo a nuestra galería y elige tu favorito...   Berta Almagro   En Prada pudimos ver broches y peinetas embellecidas con cristales y perlas configurando grandes flores que parecían recién sacadas del joyero de tu abuela. Un look con un toque inocente perfecto para darle un punto sofisticado a un recogido casual. Los moños bajos y ligeramente deshechos de su desfile se adornaron con piezas bañadas en oro amarillo con esmeraldas, perlas, rubíes y amatistas, que eran un homenaje a las joyas familiares que pasan de madres a hijas. También pudimos ver finas diademas de piedras, que enriquecían hasta el más sencillo de los recogidos. En las melenas peinadas al estilo años 40 pudimos ver adornos laterales que recordaban a ramilletes de flores coralinas, convirtiendo a sus portadoras en sirenas modernas con el pelo colocado a un lado a lo Veronica Lake. En Chanel además de broches con su logo, pudimos ver diferentes tipos de diademas en su versión más minimalista y elegante. Una simple tira de terciopelo o tela se anudaba sobre el despeinado moño francés para celebrar el famoso chic non chalante de las parisinas. Berta Almagro -