Hoy nos acercamos a varios ejemplos de tecnología aplicada al marketing móvil que ya triunfan en medio mundo...
Shopkick & iBeacon
iBeacon es un dispositivo BLE (Bluetooth de bajo consumo) lanzado al mercado por Apple que emplea una señal de baja intensidad detectable por dispositivos iOS 7. Se trata de un aparato de reducidas dimensiones y batería de larga duración que se puede colocar bajo los mostradores de tiendas o en los propios escaparates y tiene un alcance de casi 50 metros.
Por su parte, la aplicación Shopkick es como una especie de Foursquare para el potencial comprador, quien va ganando diferentes kicks al llevar a cabo acciones tan simples como escanear productos, visitar puntos de venta o realizar compras. Los kicks actúan como pequeñas recompensas muy jugosas para el usuario.
¿Por qué esto nos puede interesar?
Los almacenes Macy’s han puesto a prueba la combinación de la aplicación Shopkick e iBeacon, dando como resultado shopBeacon. Cóctel explosivo si de marketing móvil se trata.
Este combo descodifica la localización del usuario mostrándole automáticamente descuentos o novedades a partir de los gustos del potencial comprador.
Nuestras opiniones difieren en la redacción, ¿es un invento sin precedentes que nos hará la vida más fácil o deberíamos tener cuidado al dejar en manos de terceros nuestros datos personales?
Tecnología NFC
Aunque es algo relativamente común para muchos, quizá si os hablamos de tecnología NFC [Near Field Communication – Comunicación de campo cercano, si somos muuuy fieles a la traducción literal en español] os quedéis como estáis. Sin embargo, si nos referimos a ella como "contactless", la cosa cambia… ¿verdad?
Se define como una “tecnología de comunicación inalámbrica, de corto alcance y alta frecuencia que permite el intercambio de datos entre dispositivos” y es más cotidiana de lo que parece, ya que está presente en multitud de actos mecánicos que realizamos día a día.
¿Quién no pasa su tarjeta de transporte por delante de un lector cada vez que toca moverse en transporte público? o ¿quién no hace lo mismo con un travel pass en el móvil al embarcar en el avión?... ¿habéis probado el pago contactless, simplemente acercando la tarjeta de crédito al datáfono?
Como veis, las posibilidades son infinitas y parece que las empresas están empezando a conocer cómo llevarlas a su terreno. Su mecanismo es muy simple para las dos partes: los usuarios no tenemos que descargar e instalar aplicaciones en los dispositivos (ocupando memoria) y las empresas no desembolsan grandes sumas de dinero al llevarlas a cabo.
¿El resultado? Basta con acercar el dispositivo a una pegatina o etiqueta adosada a un producto y voilà… la magia se acciona. Esta nueva tecnología inalámbrica deja obsoleto el ya conocido código BIDI.
Diana Postigo - @lady_didi_
