Ambos fueron iconos de estilo por separado y cuando se juntaron en 1968 se convirtieron en la pareja más chic de su generación. La historia de Jane Birkin y Serge Gainsbourg se recoge ahora en un libro que recopila fotografías de la pareja hechas por el hermano de ella, Andrew Birkin, editado por Taschen. Además de las imágenes, en el volumen también se incluye un cuaderno de texto -con una introducción escrita por la propia Jane Birkin y las memorias del fotógrafo sobre la pareja- un parche bordado, un póster y una lámina con pegatinas.   Él tenía una de esas bellezas extrañas que generaba una atracción especialmente potente cuando se ponía delante de la cámara. Su vestuario solía estar compuesto por camisas y americanas, siempre con un aire descuidado, como si las acabase de recoger del suelo al levantarse, la encarnación del encanto francés en masculino. Por su parte, la belleza de ella sigue siendo hoy en día, ya habiendo superado los 60 años, indiscutible. En su juventud inspiró hasta uno de los bolsos más icónicos de la historia  -el Birkin de Hermès, hecho a medida para ella después de encontrarse con el presidente de la compañía en un avión- y su estilo fue (y sigue siéndolo) imitado por miles de mujeres en todo el mundo.   Ese encanto, individual y en pareja, que ambos destilaban se puede apreciar en las imágenes que se recopilan en el libro. No se trata de fotografías de estudio ni de editoriales de moda, sino que son fragmentos de su cotidianidad en los que se puede comprobar hasta qué punto eran la confirmación de esa gran verdad que dice “O se tiene o no se tiene”. Inimitables.

Carmen López