Hacen suyas cada red social, donde muestran sus "perfectas" vidas pasadas por filtros y por retoques de VSCO cam.
Muchos diarios fueron los que inundaron titulares con "la generación perdida", además de muchos otros que eran para echarse a temblar.
Lena Dunham
Dunham ha sido la última en decidir abandonar la cuenta de Twitter para que la gestione su equipo. Todo esto por motivos personales resumido en que le resultaba "cancerígeno".
Kendall Jenner
La modelo es un ejemplo de cómo sucumbir al poder de los likes. Las últimas noticias atisbaban que la modelo abandonaría su cuenta de instagram por la falta de feed.
Excesos
La postu-tendencia de comparar nuestras vidas con las de aquellos que aparecen en nuestro timeline, nos obliga a compartir fotografías o vídeos presumiendo de nuestros logros. Logros que hace un tiempo se consideraba lo más normal y lógico como obtener el carne de conducir o graduarse de cualquier curso académico. Este comportamiento tiende a banalizar cualquier realidad perdiendo la esencia de la misma. Ya no nos quedan momentos especiales o íntimos, instagram lo sabe todo. Conviene puntualizar que algunos de estos jóvenes desarrollan una dependencia enfermiza de las redes, pero otros saben como utilizarlas y sacarles el máximo aspecto creativo.
Muchos miembros de la generación millennial han comenzado a cerrar sus cuentas por la sobreexposición del yo social. Recordemos el robo que sufrió la reina Kardashian por compartir cada movimiento en las redes.
A medida que aumenta nuestra exposición en internet, por ende, aumentan también el acoso y los ataques de celos. Instagram se considera la red más vanidosa de todas, permitiendo a las personas que sean una versión "mejorada" de ellos mismos. Una versión que se encuentra en unas vacaciones permanentes y fuera de la vida cotidiana.
En la moda
La diseñadora de Céline, Phoebe Philo, aseguró que una de las mejores cosas sería no existir en Google.
La satisfacción que nos proporcionaban las redes se ha ido desvaneciendo con el tiempo por la saturación de aquellos que pretenden hacerse un hueco en la estampa laboral 2.0, "instagramer", "blogger" o "youtuber".
En la música
El silencio digital parece a veces la mejor opción, desaparecer del panorama y desintoxicarse con un poco de privacidad. Los que deciden mantenerlas son en ocasiones por motivos profesionales, actualizando su feed únicamente cuando es completamente necesario como Iggy Azalea.
La falta de privacidad y los comentarios negativos son las principales razones por las que los millennials deciden clausurar cualquier interactividad.
Pero lo cierto es que ellos mismos fueron los que decidieron exponerse de tal manera. Los 15 minutos de fama que predicaba Warhol se han extendido; pero exigen un trabajo de exposición constante al que muchos sucumben...
Muestro, ¿luego existo?
Lidia Ligero @lidialu_
