¿Por qué el VERDE OLIVA será el nuevo negro?

Ya lo decía Lorca: «verde que te quiero verde». Pero ahora lo repetimos todas las amantes de la moda porque, concretamente el verde oliva, ese tono a medio camino entre lo terrenal y lo elegante, ha dejado de ser un acompañante tímido en la paleta de colores para subirse al trono cromático con paso firme. Sí, amigas, es oficial: el verde oliva es el nuevo negro.

Puede que suene radical, incluso atrevido. Pero en la moda, como en el amor, no gana quien llega primero, sino quien sabe quedarse. Y el verde oliva está dispuesto a colarse en nuestros armarios por una larga temporada. 

¿Que de dónde viene este flechazo colectivo? El verde oliva tiene algo de tierra, de raíz. También es el color de algo que nos encanta –la gilda del aperitivo de los domingos–, es sofisticado y tiene la magia de combinar con todo sin robarle el protagonismo a nadie. Y todo esto es algo que, desde luego, los grandes diseñadores saben:

Bally marcó el tono oliva en faldas de piel. Diesel ofreció su visión más industrial del color de la temporada en su colección para la temporada otoño-invierno 2025/2026. En Gucci, el verde oliva aterrizó como si quisieran anunciar una nueva era estética.

Tod’s tiñó trajes de sastrería en varios colores, entre ellos, el verde oliva. Mientras que, Maison Margiela suavizó el enfoque con capas de gasa beige sobre vestidos teñidos de este verde.

La pasarela de Victoria Beckham también reinventó varios de sus clásicos en este tono. Saint Laurent, por su parte, propuso el oliva en cuero y encaje.

La propuesta más artesanal llegó con Elie Saab, que no solo mostró vestidos de alfombra roja, sino también conjuntos de crochet veraniegos, demostrando que el verde oliva se mueve con soltura entre estaciones.

Dries Van Noten, en cambio, lo usó en looks de fiesta, aportando brillo a un tono que solemos asociar a lo sobrio. También Miu Miu lo tuvo muy presente. 

Así, entre desfile y desfile, el mensaje quedó claro: el verde oliva ya no es un color auxiliar. Ha dejado de ser «esa alternativa al negro» para ocupar su lugar con plena autoridad.

El verde oliva es el nuevo negro y ha llegado para quedarse. Te lo demostramos con nuestras piezas favoritas a continuación:

Cómo sumarte al verde oliva, el sustituto del negro, el próximo invierno

Ligera, con caída fluida y ese brillo satinado que la convierte en la compañera ideal para un plan improvisado entre semana. Esta falda verde oliva de Mango lo tiene todo.  

Escote bonito, un largo elegante y el color del momento. En resumen: vas a querer llevar cada día este maxi vestido firmado por Bimba y Lola.

Cuando el frío no de tregua, esta bomber te protegerá. Acolchada, con aire beisbolero, relleno calentito y repelente al agua, esta prenda sporty en verde oliva te solucionará cualquier look. ¿Te la vas a querer quitar? Difícil. 

Otro imprescindible que deberías tener en el armario este otoño es una minifalda, obviamente en verde oliva. Esta, de corte evasé, pliegues y estilo colegiala, funcionará con lo que le pongas encima. Pruébalo y verás.

No podíamos irnos sin hablar de esta novedad increíble de Loewe. El bolso Madrid ha sido el último regalo de Anderson antes de su salida de la firma y, por si ya no fuese perfecto por su forma y funcionalidad, el diseñador tuvo la gran idea de hacerlo en tres colores, entre ellos, el verde oliva, que ya nos tiene conquistadas.

Ya sabes: si el negro era tu zona de confort, el verde oliva pasará a ser tu salto sin red. Al fin y al cabo, el verde es el color de la esperanza, ¿no? 

Sofía Villar: @sofiavillarb

Imágenes: Cortesía de las firmas.