Es viernes, comienza la segunda quincena del mes de julio y muchos afortunados se lían la manta a la cabeza para empezar el, probablemente, período más ansiado del año: las vacaciones de verano. Playa, montaña, turismo urbano... en definitiva, relax, ocio, diversión, alegría... ¡buena cara! ¿Y qué pasa con los que nos quedamos en la gran ciudad? Pues que seguiremos respirando polución y volviéndonos grises a medida que avanza el verano (y verdes, de envidia).
Pero no nos bloqueemos. En Vanidad siempre tenemos la solución, y esta vez viene de la mano de uno de nuestros salones de belleza preferidos, Le Petit Salon (Almagro, 15). Un reducto de tranquilidad en medio de coches y malos humos, un oasis en medio del desierto, la quintaesencia de la belleza. ¡Sí!
Y para evitar todos los males anteriores, solamente necesitas encontrar 30 minutos y reservarlos para ellos. En Le Petit Salon te ofrecerán un té mientras te invitan a pasar a una habitación en la que las prisas de la gran urbe no tienen cabida. Una vez allí, déjate llevar y prueba su nuevo tratamiento: luminosidad intensa en tan solo media hora. La prestigiosa casa de inspiración dermatológica Biologique Recherche y las expertas manos de las esteticiennes de Le Petit Salon harán que desaparezca cualquier huella de estrés o cansancio de tu rostro. Inmediatamente lograrás el efecto "he estado descansando en la playa durante quince días y vengo relajadísimo" y los efectos de la vida en la gran ciudad desaparecerán. ¿Quién dijo miedo al verano en la capital?