Una vez al mes, A contracorriente films nos invita a uno de sus clásicos estrenos en la madrileña Academia del Cine. Los pases no están dirigidos a prensa y reúnen amigos, académicos, algún crítico, y un público muy interesante al que nos une el amor por el séptimo arte.

La verdad es que la distribuidora se ha convertido poco a poco en la gran referencia independiente española. Y todo gracias a un gusto exquisito a la hora de elegir películas, en su mayoría europeas a la vez que (y disculparnos por usar ese término) comerciales.

Adolfo Blanco, el capitán de esta gran tropa de mineros buscadores de buenas películas y su equipo, han conseguido llevar a la pantalla grandes momentos del cine. La ya inconmensurable Intocable, es un gran ejemplo. Una de las mejores cintas de la historia del cine europeo actual, la maravillosa La librería, fruto de una intensa colaboración con Isabel Coixet; Train to Busan, o tantas otras que ha convertido su sello en una garantía de calidad, a la hora de ir a ver una película en pantalla grande.

Hace poco asistimos a uno de sus estrenos estrella de la temporada: Destroyer, a pesar de lo apetecible del cartel fue un estreno privado y cómodo porque coincidía con la fiesta de los nominados de los Goya.

El título del filme, hace fiel reflejo de la película, un thriller, rotundo, pero a la vez muy interesante.

A pesar de ser una cinta inusual para esta distribuidora, en palabras del propio Adolfo, Destroyer merece estar en el catálogo de esta compañía española y convertirse en otra de sus cintas de culto. Y no solo por estar protagonizada por Nicole Kidman.

Destroyer, o como creo que la van a titular en el mercado español, Una mujer herida, se estrenará el próximo día 22 de febrero y va a ser de las cintas mas comentadas de este trimestre.

 

 Nicole Kidman y Sebastian Stan, protagonistas de Destoyer. Foto: A contracorriente Films

 

Dirigida por Karyn Kusama, regidora y escritora nacida en Brooklyn, New York, conocida por La invitación (2015), una película alrededor de una enigmatica cena de amigos, con un casting soberbio o Æon Flux (2005) un thriller futurista de acción la verdad es que bastante malo, protagonizado por Charlize Terón, Karyn le imprime una mirada a la película y un ritmo muy especial, áspero pero de autor, emocional pero dura, tanto psicológicamente como a nivel humano. 

En el fondo, pero no en la forma, la cinta es un pultp fiction visto a a través de los ojos de una mujer. Pero lo realmente notable, sobresaliente es Nicole Kidman, que parece esta detrás de un proyecto que gira alrededor de su interpretación y su personaje, tan lleno de matices, expresiones y gestos que se endurecen con el tiempo. La ex de Tom, es un prodigio de la interpretación y es capaz de parecer una adolescente seductora y a la vez un aborrecible desecho humano. Como dice el material promocional de la productora "nada de lo que Nicole Kidman ha hecho en su carrera puede prepararte para Destroyer" y bueno estamos bastante de acuerdo con la sentencia.

Destroyer es un espectáculo con unas transformaciones en los personajes que superan al propio guión, hasta límites que solo habíamos visto en un famélico Matthew McConaughey, o en un alcohólico Johnny Depp que todos recordamos en alguno de sus papeles más memorables.  El trabajo de maquillaje elaborado, unido a cambios severos de peso y a un vestuario que lo clava, puede acercar a Kidman a tocar una estatuilla dorada, o a ser recordada por muchos años por esta interpretación.

 Nicole Kidman. Foto: A contracorriente Films

 

Nicole ya nos había sorprendido como Virginia Woolf en The Hours, con un trabajo casi cómico de maquillaje por su tremenda nariz. También en la gótica The Paperboy, en Dogville de Lars von Trier, y en ese experimento senil brillante del morbo, Eyes Wide Shut. En todas era Nicole pero en ninguna de ellas, se convierte en dos papeles tan drásticamente diferentes como en Destroyer.

En la película además, Kusama, filma unas palizas que se lleva la pecosa, con una credibilidad asombrosa y vuelvo al ángulo femenino, con una manera de contarlo muy especial. Cruza a Pulp Fiction, con Kurt Cobain, mezcla True Romance (Amor a quemarropa en España) con Juergen Teller y aún así nada se acerca a la interpretación de esta soberbia Nicole Kidman.

Nicole interpreta las dos caras de Erin Bell. Por un lado, una detective cuarentona de Los Ángeles pasada de vueltas y forrada de arrugas y por otro, una mujer virginal, inocente y llena de pecas que completa una historia en dos lineas temporales diferentes.

Destroyer se estrenó en Estados Unidos el pasado 25 de diciembre. Ya ha pasado por los Festivales de Telluride y Toronto y casi hace bingo en la categoría de Mejor Actriz Protagonista en la 76ª edición de los Globos de Oro.

La trama engancha con un giro-loop inesperado al final de la cinta, pero insisto, lo mejor, de verdad es la actuación y la prodigiosa transformación física de la australiana. Aquí os dejamos el tráiler:

Merece la pena verla, espero que la disfruteis.

 

Texto Emilio Saliquet @saliquet  Imágenes: A contracorriente Films

 

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