El desfile de la
nueva colección Rêve de Nuit de
Andrés Sardá comenzaba de la mano de la
vedette Bibi Andersen como la perfecta huésped de la suite de lujo de un gran
Hotel situado en un idílico paisaje alpino en el que nos sitúa el diseñador. Este es el pilar básico de su colección en la que nos hace soñar con la estancia en este maravilloso, lujoso y lujurioso lugar en el que nuestras
fantasías pueden hacerse realidad. El
personal del hotel nos recibe con sus más provocativas galas, entre ellos se encuentran las "botones", las chófer, las cocineras y hasta las doncellas.
La figura de la
doncella siempre ha formado parte de una serie de clásicos mitos eróticos de nuestra cultura sin saber exactamente porqué; quizás el deseo de lo prohibido por parte de los pertenecientes a la alta sociedad en cuánto a poder mantener relaciones con personas de distinta clase social ha hecho de las doncellas esa mujer prohibida y más que deseada.
Andrés Sardá va más allá y decide convertir en mito erótico otras profesiones como la de cocinera, botones, chófer... ¿Cómo? A través de la utilización de materiales como la organza de seda, el encaje de
chantilly, raso y colores como el blanco, negro y rojo.
Doncella
Comenzamos por la clásica - o no tan clásica- doncella, en este caso llevada al extremo con provocadores uniformes que comienzan con encajes y terminan con medias de rejilla.
Botones
Una botones al servicio de la provocación y el placer. En este caso vemos la reinterpretación de esta entrañable figura convertida en un personaje tremendamente sexy que cambia el traje abotonado de dos piezas por una chaqueta roja
cropped y una braga de talle alto de
eyelets con liguero.
Cocinera
No sabemos si será muy práctico para cocinar platos deliciosos, pero con este outfit seguro que a alguien se le cae la baba.
Chófer
Una chófer cuyo uniforme es un
body que no deja demasiado a la imaginación para llevarnos directos al placer.
Paula Morón - @paulamoji
Fotografía: Mercedes Benz Fashion Week
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