En el siglo XVIII las mujeres fijaban a su rostro pecas artificiales realizadas en tafetán para tapar marcas y arrugas, o simplemente para añadir un detalle de belleza a su rostro. Las pin up de los años cincuenta se pintaban pecas y lunares con delineador, porque se consideraban de lo más sexy, y en cambio hoy, sus poseedoras tienden a ocultarlas con maquillaje. Una opción ante la que no sucumben pelirrojas ilustres como Emma Stone o Emma Watson. Pero todavía podemos viajar más atrás en la historia. Si nos remontamos al Imperio Romano o incluso a la Antigua Grecia, podremos encontrar documentos de los galenos de la época, en los que se habla de pequeñas cremas en forma de pequeños puntos negros y marrones que las mujeres incorporaban a sus rostros para disimular arrugas e imperfecciones. Y hoy, ¿qué dice la pasarela? A juzgar por las propuestas para esta primavera 2015, las pecas están llamadas a triunfar. Incluso llevadas hasta la exageración, como advertimos en el look de belleza del desfile de Preen: Para Val Garland, que ideó el maquillaje de este desfile, se trata de una caracteristica que rejuvenece el rostro, aportando un toque aniñado e inocente lleno de frescura. De hecho confiesa que modelos como Gisele Bündchen suelen pedirle que añada algunas pecas a su maquillaje para parecer más joven, y marcas como Topshop ya venden lápices especiales para que aquellas que no están dotadas de estas marcas de belleza puedan pintarlas a su antojo. Y si la naturaleza te ha adornado con ellas, ¡presume de pecas! Arancha Gamo
Tus pecas son sexys, no las ocultes
Las pasarelas se rinden ante ellas y las celebrities ya no las ocultan. Las pecas son sexys, muy sexys
Las llevas en los genes, están en tu piel desde tu infancia, y en ciertos momentos de la historia se han considerado un símbolo de belleza. Sin embargo tú, te empeñas en ocultarlas. ¿Por qué? Esta semana era Kendall Jenner quien presumía de pecas en un su cuenta de Instagram gracias a un selfie sin base de maquillaje, -eso sí, no sin su máscara de pestañas y su sombra de ojos- recordando aquella niña que, mucho antes de ser modelo, prescindía del maquillaje para ocultarlas.