2. Cintas
En principio pueden utilizarse del mismo modo que las diademas, sin embargo los usos de las cintas son más variados, especialmente por ese aire boho que tienen. Pueden integrarse en recogidos o colocarse en medio de la frente, para un look de aire más hippie.
3. Flores
El resurgir de las flores como complementos de pelo es bastante reciente, aunque un poco tímido más allá de los festivales de música. Sin duda, en este caso, las coronas de flores son las reinas indiscutibles. La clave está en la elección de colores vivos y de un tamaño lo bastante grande como para que llamen la atención. Son ideales para esta época del año y dan un toque romántico y divertido a tu look.
4. Pasadores
Los más usuales son los bobby pins u horquillas, que usamos para mantener el cabello en su sitio de forma invisible, sin embargo hay cientos de diseños de pasadores joya, de todos los colores y tamaños. Y aunque son piezas pequeñas, no se necesita mucho para transformarlos en un detalle impactante. Importante: no debes combinarlos con pendientes.
5. Pañuelos y turbantes
Por su comodidad se convierten en tendencia todos los veranos. Puedes colocarlos de muchas formas diferentes, llevarlos estampados o lisos, con o sin adornos... Son perfectos tanto para un look de día -si eliges una bandana y la atas alrededor de tu cabello a modo de diadema- o para la noche -si te decantas por la versión turbante, inspirándote en los setenta-.
6. Cadenas
Empezamos a verlas durante el año pasado y aunque aún no han terminado de ubicarse, ya que resultan algo arriesgadas, se van haciendo un hueco. Las más solicitadas son las que aportan un toque bohemio de tintes románticos. No es el accesorio más fácil, pero bien combinado puede marcar la diferencia.
Ángeles López