La casa italiana vuelve a Florencia para presentar su desfile Crucero 2026 y desde Vanidad te desvelamos todos los detalles de esta noche mágica. ¡Sigue leyendo!
Final del desfile Gucci Crucero 2026. Imagen: Cortesía de la marca.
Final del desfile Gucci Crucero 2026. Imagen: Cortesía de la marca.
La casa italiana vuelve a Florencia para presentar su desfile Crucero 2026 y desde Vanidad te desvelamos todos los detalles de esta noche mágica. ¡Sigue leyendo!
El 15 de mayo, Gucci no solo presentó su colección Cruise 2026, sino que celebró un retorno a sus raíces. ¿El escenario? Nada más y nada menos que el Palazzo Settimanni de Florencia, la ciudad donde todo comenzó para la casa italiana en 1921.
Como si de un viaje en el tiempo se tratara, la firma nos llevó por un recorrido estético que mezcló siglos de historia textil, artesanía italiana y pura fantasía Gucci. Aquí una recopilación de todo lo que sucedió:
La elección del Palazzo Settimanni no fue casual. Este edificio del siglo XV, situado en el barrio artesanal de Oltrarno, es actualmente el Archivo de Gucci y, más allá de almacenar historia, es un espacio vivo de creatividad. «El Archivo no es solo un depósito de nuestro pasado; es un espacio donde los códigos de identidad de Gucci se reinterpretan constantemente», explicaba Stefano Cantino, CEO de la firma.
Y reinterpretación es la palabra clave. Porque esta colección Cruise no es una carta de amor al pasado, sino una fiesta donde el ayer, el hoy y el mañana bailan juntos.
La pasarela vibró con brocados y terciopelos dignos de las cortes renacentistas, mezclados con toques minimalistas y siluetas arquitectónicas. Un viaje sartorial desde la Edad Media hasta el futuro con un punto muy Gucci: excesivo, elegante y deliciosamente impredecible.
El desfile tuvo una escenografía íntima pero cargada de emoción. Las modelos pasearon por las salas del Palazzo con prendas que gritaban artesanía y detalles pensados al milímetro: hombreras, encajes bordados, strass estratégicamente colocados y un uso del monograma GG reinventado con una nueva «G» gráfica que apareció en cinturones, tacones y hebillas hasta medias.
En la colección, la influencia del archivo y la rica historia de Florencia daba lugar a una divertida mezcolanza que abarcaba desde lo minimalista hasta lo maximalista, planteando un recorrido a lo largo de las décadas y un mosaico que integra siglos de cultural material (no en vano, pues Florencia ha sido un centro neurálgico de fabricación textil desde la Edad Media).
Asimismo, también pudimos ver hombreras, kitten heels y una selección de prendas que mezclaban lujo clásico con guiños contemporáneos: desde un abrigo de piel en tono champán combinado con unas sandalias fucsia de impacto, hasta blazers estructurados llevados con medias monogramadas y maxi bolsos de cuero plegado.
Tampoco faltaron las blusas psicodélicas de estampado setentero, pantalones de terciopelo ajustados y accesorios sobredimensionados como gafas y pendientes escultóricos para evocar esa elegancia despreocupada, refinada y radicalmente moderna tan propia de la casa de lujo italiana.
Entre los grandes protagonistas, el bolso «Gucci Giglio» merece mención especial. Su nombre homenajea al «giglio», el lirio símbolo de Florencia y, la mejor parte, estará disponible justo después del desfile. Move fast!
Durante el desfile también pudimos ver el nacimiento de «Monili», una mini colección de alta joyería en colaboración con Pomellato. Oro, piel y pavé de diamantes dieron forma a collares y bolsos minaudière que mezclaban lujo y savoir-faire en dosis exactas. Todo muy Gucci, hecho para que no puedas parar de mirarlo.
Al desfile asistieron nombres como Paul Mescal, Viola Davis o Jeff Goldblum, quienes fueron testigos de un broche final un tanto particular. Y es que, y rompiendo con el tradicional cierre nocturno, las modelos salieron del Palazzo y desfilaron por la plaza exterior.
Con esto, la casa italiana lanza un mensaje claro: no se esconde, se lanza a las calles, se funde con la ciudad que la vio nacer y grita al mundo que está lista para su nuevo capítulo. Gucci es Florencia y Florencia es Gucci. Y si algo ha dejado claro este desfile Cruise 2026 es que las raíces importan, pero solo si sabes convertirlas en alas.
Lucía Martínez Rubio @luciartinezrubio
Imágenes: Cortesía de Gucci.