Uno de los síntomas principales del aislamiento en casa como consecuencia del estado de alarma en nuestro país, ha sido la falta de sueño (o también conocido como insomnio transitorio).

Llevamos más de dos semanas con poca actividad física, en comparación con la que podíamos llegar a tener antes de la cuarentena. Nuestro cuerpo lo está padeciendo, nuestros niveles de ansiedad aumentan poco a poco debido al encierro y esta causa acaba afectando directamente a nuestro sueño.

Ahora mismo son pocos los que podrán afirmar que están teniendo un sueño reparado (y si eres uno de ellos, eres la envidia del país)... Actualmente, sufrir un problema de sueño es totalmente normal y como te decimos, es transitorio. Así que don’t panic!

Muchas veces no damos importancia al hecho de tener una buena calidad de sueño y es que son tantos los beneficios de dormir bien, que en Vanidad nos hemos puesto a buscar qué podemos hacer para conseguir un sueño intenso y profundo durante todo noche... Por suerte, hemos descubierto que la comida es uno de los factores principales en cuanto a nuestra capacidad de conciliarlo, lo que quiere decir que dormir bien dependerá, en parte, de lo que comamos.

“Desayuna como un rey, almuerza como un príncipe y cena como un pobre"

Este tiene que ser nuestro emblema durante esta cuarentena ya que además de dormir mejor, nos ayudará a mantener nuestra figura.

Siguiendo los principios básicos, lo que ingerimos en el desayuno podemos quemarlo a lo largo del día mientras que la cena reposa en nuestro estómago mientras dormimos.

¡Evita los alimentos pesados!

Los alimentos pesados también influirán en nuestra digestión y no nos dejarán descansar como toca. Por ello, optaremos por preparar cenas ligeras y las ingeriremos unas 2-3 horas antes de irnos a dormir, para asegurar que las digerimos antes de meternos en la cama...

Desde VANIDAD, os proponemos diferentes ingredientes que incentivarán nuestro descanso: 

1. Hortalizas y/o verduras

Las hortalizas y/o verduras tienen un alto nivel nutricional y son fáciles de digerir (las que no son crudas, claro). Una buena opción para cenar por ejemplo, podría ser un plato de hortalizas como espárragos trigueros salteados con gambas o jamón. Esta hortaliza nos ayudará a mejorar nuestra digestión y evitarán la pesadez estomacal.

Un pisto también sería una buena propuesta para cenar. Además, esta receta típica de la cocina española en base a tomate y pimiento verde, es de lo más sencillo que hay.

2. Sopas y cremas de verduras

Como todo en la vida, cuanto más simple es algo, más fácil es. Pues, cuanto más sencillo sea el plato que te prepares (como en este caso una sopa o una crema de verduras), más rápida y fácil será su digestión. Apunta: las cremas de verduras tienen que ser sin lácteos, para que no se conviertan en pesadas.

Nosotros os proponemos una deliciosa crema de calabacín y, si te quedas con hambre, también puedes añadirle un huevo dura rallado. 

3. Proteínas como complemento

Tomar carne, pescado, huevos... en la cena, siempre es una buena decisión. Eso sí, mejor tomarlas como complemento a nuestros platos, no como ingrediente principal.

Un salteado de verduras y pollo o ternera, así como una ensalada donde uno de los toppings sea una proteína, será una opción idónea para saciarnos y tener una digestión relativamente ligera.

Asimismo, llevar una rutina activa durante nuestro día será vital para dormir bien por la noche. Un poco de ejercicio físico y mental serán el complemento perfecto para conseguir recuperar nuestra somnolencia. 

¡Ánimo que cada vez queda menos! We’re doing great! 

 

Sofía Cintas: @sofcintas

Imágenes: Archivo y Giphy