Lunes de resaca post San Valentín. ¡Ay! Este día en el calendario tan odiado por los solteros, aunque no lo quieran, porque los que están en pareja la mayoría de ellos la pasan por alto, o eso dicen, o eso nos hacen creer. “El amor se demuestra a diario” Claro que sí, pero simplemente el hecho de que la persona que quieres te regale una bolsa de patatas ese día tan señalado, te sientes casi elevada entre las nubes del amor. Eso es así.
Vivimos en una sociedad en la que estar soltero parece estar mal visto y no quiero entrar en debate con aquello de los “micromachismos” pero, si eres mujer de treinta y estás soltera te pasa porque eres una rara. Sin embargo, si eres hombre te pasa porque quieres disfrutar la vida al máximo, y eso es, no comprometiéndose con absolutamente nada nunca.
Ahora hay cientos de aplicaciones que te invitan a encontrar a esa media naranja desde el sillón de tu casa, o en el descanso del curro, o mientras esperas en la consulta del ginecólogo. Tienes que encontrar a alguien que quiera compartir la vida contigo, tienes que, que se te pasa el arroz, bonita… Y yo digo, pero ¿y dónde quedaron esas estrategias para coincidir por la calle con el chico que te gustaba? ¿dónde quedaron los bares de copas y los acercamientos tontos? ¿Y las fórmulas para llamar la atención de alguien en la discoteca? ¿Y qué pasa si es que no me apetece encontrar ahora a mi media naranja porque me he dado cuenta de que es prácticamente imposible y que si algún día quiero ser madre ya me las ingeniaré yo sola? ¿Y si no quiero ser madre?
¡Ay! Qué sociedad.
Por otro lado, yo no sé ligar, yo lo hago francamente mal. Y es más, creo que en el fondo ahí reside mi encanto, en lo mal que lo hago. Si vas de dura se piensan que eres una egocéntrica y si vas de blanda, que lloras por las esquinas y vives en un drama perpetuo. Así que ya os digo que yo no sé. Supongo que habrá que hacerlo de una manera aséptica, en pequeñas dosis. Ni frío ni calor. Te hago caso pero no te lo hago. Te quiero pero no te lo digo. Que no se te note, sobre todo eso, porque en cuanto se te note van a salir corriendo ¿Lo sabías? La gente quiere aquello que no puede tener, somos así de imbéciles. Nos gusta morder el polvo.
Y en cuanto a San Valentin, pues eso, resaca emocional de lado, si no existiera sería mucho mejor para todos. Lo digo en serio, inventad mejor un green tuesday o un brown sunday.
Otra movida, un día que no nos recuerde a los solteros que somos la parte obtusa de este engranaje aunque sea por decisión propia. Aunque no sepamos ligar, aunque estemos con el corazón hecho trizas por un desamor, también nos merecemos un descanso.
Alejandra Remon – @alejandraremon
