El pasado fin de  semana se celebró la Noche de los Museos en las principales capitales españolas. Una mezcla de arte y curiosidad se respiraba en las calles de Madrid donde Vanidad pudo comprobar que la cultura sigue siendo una prioridad para la gente. Los españoles pudieron disfrutar de las mejores exposiciones y salas de arte totalmente gratis, eso sí, no sin antes hacer la consabida cola para lograr entrar.  Desde las siete de la tarde y hasta la una de la madrugada, la noche del sábado dejaba a un lado las fiestas, cenas y cocteles para dar la bienvenida a la democratización del arte para todos los ciudadanos. El Museo del Prado, el Museo Reina Sofía o el Museo Thyssen-Bornemisza, entre otras instituciones, abrieron sus puertas para recibir a los madrileños. Desde Vanidad pudimos comprobar en las instalaciones del Museo Thyssen como cientos de personas se agolpaban en la entrada con la ilusión de poder disfrutar de la exposición de Chagall, muestra que ha calado hondo entre los habitantes de la capital. Dividida en tramos, la exposición recoge las diferentes fases por las que el artista ruso fue evolucionando, desde su perspectiva religiosa hasta su etapa denominada “El circo”. Una evolución que combinó elementos cubistas, del fauvismo y del orfismo de Robert Delaunay que culminó en un estilo propio y complicado de definir.  Algunos curiosos en el museo se acercaban con timidez a las grandes obras, otros más decididos esquivaban a los más despistados para apreciar cada detalle de los lienzos y bocetos. Las salas se llenaban de personas y voces con un murmullo solo acallado por los toques de atención de los vigilantes. La expectación del público iba en aumento a medida que las oleadas de visitantes se sustituían. Acaba de pasar y ya tenemos ganas de que llegue la Noche de los Museos del año que viene. Por Laura Rizo. Book trendy girl.