No sólo de uvas vive la Nochevieja
No sólo de uvas vive la nochevieja. Estamos a punto de despedir el año al son de las campanas y tomando las típicas doce uvas. Pero no en todos sitios se ha
Cuando hablamos de Nochevieja la relacionamos de forma inmediata con el frío, con las campanadas de la Puerta del Sol, con las uvas. No podemos imaginar vivirla de otra manera. ¿Qué te parecería tomar lentejas?, ¿y despedir el año en bañador a orillas del Atlántico?, ¿qué tal comprar tus propios fuegos artificiales y lanzarlos desde el jardín de tu casa o en plena calle, con tus amigos?. Estos son sólo algunos ejemplos de cómo se puede vivir esta noche tan especial.
Muchas son las formas en las que podemos despedir el año. La originalidad se mezcla con la tradición en todos los países del mundo. Los británicos están pendientes de las campanadas del Big Ben; los neoyorquinos esperan pacientemente a que una bola dorada les indique la entrada al nuevo año en pleno Times Square; los vieneses se deleitan con música clásica gracias a su "concierto de año nuevo" ofrecido por la filarmónica de Viena; los parisinos se deleitan con una Torre Eiffel iluminada por cientos de fuegos artificiales; y mientras que los italianos comen lentejas para asegurar su fortuna económica en el año que entra.
Esto, claro, en el hemisferio norte del globo pero...¿qué pasa con el sur? Allí es verano y tienen una visión totalmente distinta de la nuestra con respecto a la forma de vivir la Nochevieja. En Brasil todos se visten de blanco y despiden el año dando ofrendas a la diosa del mar; en Australia son de los primeros en dar la bienvenida al nuevo año y lo hacen envueltos en ruido y con un espectáculo de pirotecnia; en Israel comen manzanas con miel para endulzar el año que llega y en Ecuador, México, Venezuela o Perú comparten nuestra tradición de comer uvas.
En definitiva, hay cientos de formas de celebrar la Nochevieja. Es un noche especial que todos queremos disfrutar al máximo. Salir de un año para entrar a uno nuevo sólo puede significar cosas buenas, te cargas de ilusión y ganas para empezar nuevos proyectos y agradeces poder disfrutar de otro año más rodeado de tu gente. Eso se merece celebrarlo con una buena fiesta.
Las uvas están bien pero... ¿y empezar el año en bañador, moreno, a la orilla de la playa y bailando salsa? No te que des en la tradición y esta Nochevieja hazte un propósito de año nuevo: cambiar la entrada al año nuevo "made in Spain" por pasarla en otra parte del mundo algún año... y es que Nochevieja sólo hay una, pero maneras de celebrarla, hay miles.
¡Feliz Año Nuevo!
Rosa Egea