Dormir, salir, pasear y leer. Súper a favor de reducir a instintos primarios las actividades cuando se llega a Ibiza. A nosotros nos gusta tal que así: Para dormir... Dicen que el Hotel Es Vive no es para los débiles de corazón y, la verdad, es que cuando se llega a él uno puede experimentar el romantiquísimo Síndrome de Sthendal. La fachada Art Decó es increíble; la piscina y las palmeras, arrebatadoras. Es un oasis al llegar a la isla y es un doble oasis al volver andando cuando cierra Space o Pachá, que están súper cerca, igual que la ciudad. El restaurante fusiona cosas deliciosas (comida mediterránea y asiática), se puede desayunar hasta tarde y tienen un club dentro, el Experience, que está abierto hasta el amanecer, que es solo para huéspedes y afortunados que consiguen apuntar su nombre en la ‘guest list’. Además, es un hotel solo para adultos, que es uno de los conceptos más perfectos jamás creados por el ser humano. Y tienen chófer por si se quiere hacer algún plan especial. Sólo recomendamos salir de este Hotel para ir al Sands, el mega club de Playa D’en Bossa en el que se puede tomar el brunch, el lunch, cenar, tomar cócteles y bailar y volver a tomar el brunch. Vivan las espirales hedonistas. Nosotros hemos nacido para ellas. Hotel Es Vive, Ramón Ferrer 8. www.hotelesvive.com y www.sandsibiza.com Para bailar... Es la declaración de amor colectiva más sincera que uno puede hacer: WE LOVE SPACE. Hazlo al entrar a este templo, hazlo al salir. Hazlo mientras bailas. Es nuestro club favorito de la isla y a él vamos a peregrinar este verano todas las veces que sea posible; especialmente, los domingos, a su sesión WE LOVE SUNDAYS. El último fin de semana de septiembre lo cerrará Aphex Twin. Ahí va otra declaració, de rodillas: WE LOVE APHEX. Para leer... La primera novela de Juan Sardá se nos antoja la lectura pluscuamperfecta para Ibiza. Jaime Narváez la reseña así: “Tachar la primera novela de Juan Sardá como retrato generacional es tentador pero demasiado fácil y es que “Dinámica de los cuerpos eléctricos”, tiene (a pesar de que el protagonista no sea el autor), mucho de confesión de profundis: alrededor de cuatrocientas páginas donde un atormentado e innominado narrador treintañero confiesa un largo historial de delitos y faltas. Naturalmente están las drogas, el sexo, la fiesta, el vacío, etc. Pero no todo es tan obvio, ‘Dinámica de los cuerpos eléctricos’ es una novela valiente, con audacias formales (narración fragmentada) y que consigue un estilo personal más próximo al de Michel Houellebecq que al de Bret Easton Ellis. Dinámica de los cuerpos eléctricos. Suma de letras. ¡Y para pasear! Un día vimos una foto de Agyness Deyn paseando por Nueva York con la bicicleta más bonita del mundo. Investigamos, prendados de amor, y descubrimos que era una Electra Bike. Entramos en su web y fue una locura. Bicis de paseo, de estética 50’s, rosas, negras, con palmeras, con borlas en el manillar. Adivina cómo nos vamos a mover en Ibiza este verano y cómo vamos a volver a Vanidad. Por Marta Hurtado de Mendoza