"Babe": Las chicas y el arte
La fotógrafa y activista feminista Petra Collins acaba de editar el libro "Babe", una visión del arte y del feminismo que todas las chicas deberían conocer
La fotógrafa y activista feminista Petra Collins acaba de editar el libro Babe, cuyo título hace referencia a la forma afectiva y cariñosa en que se llaman las chicas unas a otras, en la era de las redes sociales. Despojando el término de connotaciones machistas al hacerse con el control del mismo, es toda una declaración de intenciones con respecto a la visión del arte y del feminismo que todas las colaboradoras del libro tienen en común.
Lo que ha culminado en forma de un libro que podríamos llamar generacional, no es sino la evolución de la web The Ardorous; el proyecto que Collins inició en 2010 al encontrarse sin un espacio en el que exponer su obra y, sobre todo, con la intención de proporcionárselo a otras artistas cuyo trabajo estuviese igualmente relacionado con la conciencia femenina. Desde entonces, la mayoría de sus miembros se han hecho un hueco, no sólo en el mundo de internet (donde la mayoría de ellas se conocieron), sino también en el del arte propiamente dicho. O han sido reclamadas por campos como el de la moda, que les permiten seguir explorando su condición, y por extensión la de los demás.
Entre las treinta colaboradoras destacan las fotógrafas Arvida Byström y Harley Weir, las diseñadoras de It’s me and you: Mayan Toledano y Julia Bailys, las ilustradoras Joana Avillez y Grace Miceli, o la escritora y colaboradora de la edición norteamericana de Vogue, Karley Sciortino, muchas de las cuales ya habían trabajado juntas en distintas ocasiones.
Por no hablar de Tavi Gevinson, una de las mejores amigas de Petra Collins -y algo así como su descubridora oficial-, que escribe el prólogo de Babe, en el que aprovecha para destacar el trabajo de la canadiense (también incluido en el libro) y su carácter incómodo por momentos pese a la belleza que lo caracteriza. Algo así como una metáfora del libro en sí mismo, cuya portada en un rosa brillante y firmado por todas sus componentes recuerda a los típicos anuarios de instituto americano, aunque en su interior las imágenes tienen poco que ver con las que encontraríamos en cualquiera de ellos. Una exploración a fondo acerca de la propia imagen, la sexualidad femenina y la rabia o la melancolía propias de la adolescencia.
Paula Robles