En cuanto a moda, en
París suceden grandes cosas. Y es que es la Capital de las capitales de la costura.
Ayer entre los desfiles que se vieron durante el segundo día,
Rochas (nos) enamoró. Trajo un verano tranquilo, de ropa cómoda con una inspiración deportiva, pero al mismo tiempo de ropa elegante para los paseos al borde del mar. Un verano de mujeres como las de antes, a ratos de los 50, otros, de los 60, y también de los 90, pero todo pasado por un tamiz actual.
Las siluetas son de lo más variadas: faldas lápiz, minis, largas y vaporosas o con maxi volumen, también pantalones cortos,
crop tops, corsés… Destaca una nueva reinterpretación de esquemas en el volumen centrado en las faldas o en inmensos abrigos que se confunden con capas. La riqueza de los tejidos, tanto visual como en textura, abarcó brocados, raso, cuero, punto, gasa. En total, 36 looks para soñar los largos días de verano.
Otro flechazo: la colección Primavera/Verano 2013 de Dries Van Noten. Era de esperar porque este belga es un couturier con mayúsculas, aunque no se dedique a la alta costura. Además, su capacidad para combinar estampados le convierten en todo un poderoso malabarista. Aquí, los prints se dividen en dos vertientes que van interpretándose de principio a fin, los cuadros y las flores.
También hace un ejercicio de derroche textil: seda irisada, gasa, brocados, apliques… Y se enreda de nuevo en uno de sus juegos favoritos: las superposiciones y las variaciones del mismo tema. Sólo podemos decir, gracias, Van Noten por deleitarnos de tal manera.
Hoy la agenda de desfiles viene cargada:
Balenciaga,
Balmain,
Lanvin… Sintonizad mañana este mismo canal, que os lo contamos.
María Díaz del Río
