Mujeres rusas, folclore colorista y una gran oda a la femineidad y mujer libre protagonizaron el último día de Paris Fashion Week con tres nombres referentes: Miuccia Prada, Marc Jacobs y Elie Saab. La Semana de la Moda de París no podía haber tenido mejor final.
Louis Vuitton Louis Vuitton
La mujer seductora, Marc Jacobs para Louis Vuitton lo tenía claro esta vez. Un ambiente de hotel nos describía a un tipo de chica aburrida y amante del lujo a la vez (nos sorprendió ver merodear a Kate Moss entre las tops actuales). Mujeres de diferentes épocas, femme fatales inspiradas en mitos como el de Gloria Swanson, mujeres esposas suburbanas y heroínas de Hitchcok. Entre sus propuestas, vestidos chemise, abrigos de tweed y mucho encaje engarzado en satén, pijamas con estampados florales y vestidos de té en tonos antiguos con efectos degradé.  Lilas, añil y cimarrones daban color a una colección con tintes más adultos en Marc Jacobs.
Miu Miu Miu Miu
Utilidad y folclore podrían llegar a ser polos opuestos excepto para Miuccia Prada. Medias a rayas witchy, zapatos polka dots, parkas con cremalleras hasta arriba, faldas y bandeaus. Miu Miu se inspira en las capas jugando con la superposición de la larga medida de las faldas bajo los abrigos, al igual que las rayas se mezclan con lunares, medias estrafalarias, grandes botones y colores fuertes como el rosa, amarillo y rojo en contrapartida al azul navy o el negro. Miuccia rindió su particular homenaje a los cuentos populares.
Elie Saab Elie Saab
Ensalzar la belleza y la femineidad de la mujer es una de las máximas de Elie Saab porque para ella “la mujer siempre es hermosa”, dijo en el backstage de su desfile. Muchos bordados y costuras asimétricas conformaron su propuesta para el invierno que viene, brazos desnudos o semi, capas transparentes que salían a los lados de vestidos largos hasta los pies y una pequeño homenaje a la estética rusa original. Pantalones con cinturas corsetted, chaquetas de esmoquin recortadas que iban a camino entre la androginia y femineidad en estado puro. Amalia G. Cátedra