Domingos de leopardo y glam con Alaska y Mario
Vuelven rodeados de leopardo, rosa, flamencos y demás iconos. Alaska y Mario estrenan la tercera temporada del realitie más kitsch de la televisión.
No hay dos sin tres. Vale, empezar esta entrada con algo tan clásico cómo esta frase, no hace justicia a una de las parejas más originales de este país. Pero es que es verdad. Ayer comenzó la tercera temporada de uno de los realities más revolucionarios y adorados que nos ha regalado la televisión. Si antes vimos la nacionalización, la boda, el viaje a Las Vegas y grandes momentos variados, en esta temporada el clímax llegará con la celebración del cincuenta cumpleaños de Alaska.
Los preparativos compondrán esta tercera temporada. No va a ser un cumple al uso. Los cincuenta años de Olvido - sí, gracias a MTV sabemos que los allegados a la cantante se dirigen a ella como Olvi, y para fans, nosotros- no pueden ser algo convencional. Esperamos mucho leopardo, mucho rosa, mucho maquillaje y por supuesto vestidazo de la cumpleañera. Si algo ha quedado patente en las anteriores temporadas es el amor por la moda que siente la pareja. Su actuación en el desfile de Davidelfin fue un epic moment.
Los cameos, o visitas de amigos supernormales como dicen ellos, son otras de las cosas que más nos gusta. Hemos conocido a la gran América, madre de Alaska, y a los curiosamente discretos padres de Mario. Estamos deseosos de ver quienes aparecerán este año por su piso. Los flamencos rosas de su balcón deberían pertenecer al itinerario del city tour que recorre Madrid.
Si en Estados Unidos MTV eligió a la familia Osbourne para mostrar que los heavys también van a la compra, el canal en su versión pátria, ha centrado su atención en Alaska y Mario para enseñarnos cómo dos starlets contemporáneas pasan su día a día. Sólo ellos pueden comprar medias noches o jamón york con el mismo glamour con el que compran Louboutins o cazadoras de Balmain. Ya con el primer capitulo han vuelto a enamorarnos. Nuestro lado más freak despierta de nuevo, deseoso de ver más. Con peluquitas o como un T-Rex, el caso es que nos encantáis.
Klara Morales