Ni eterna juventud, ni raquíticas medidas son necesarias para ser modelo de éxito en las pasarelas de estos tiempos. Algo está cambiando en el mundo de la moda.

 

Kate Moss o Cara Delevingne son el mejor ejemplo de que en la moda no siempre triunfan las "más guapas de la clase" sino aquellas con mayor personalidad, estilo y carácter. Las marcas buscan nuevos rostros que sorprendan y vendan, que llamen la atención y den de qué hablar. En este nuevo escenario hay hueco para modelos que sobrepasan el número 38, ya sea en edad o en talla. Repasamos los siete perfiles que siendo inesperados y poco (o nada) ortodoxos, triunfan encima de la pasarela y delante de las cámaras. 1. La imperfección es bella. Brunette Moffy, la modelo bizca, ha conseguido hacer de su defecto físico su mayor virtud y poner en jaque la definición de belleza. Storm, la agencia que descubrió a la mismísima Kate Moss, la fichó tras su debut en la revista The Pop (sí, la chica promete). Kelly Knox es otro inspirador ejemplo. La modelo confiesa en su página web su lucha por conseguir que las personas con discapacidad (carece del antebrazo izquierdo) no sean excluidas del circuito fashion.

01_KELLYKNOX_MOFFYA la izquierda, Kelly Knox. A la derecha, Moffy en la portada de The Pop

 

2. Adiós al autobronceador. Durante años, las firmas han reiterado (y lo siguen haciendo) la importancia de una tez sin imperfecciones, bien bañada por el sol o bien más propia de una muñeca de porcelana que de un ser vivo. Shaun Ross, conocido por ser el primer modelo masculino albino, lleva años desmintiendo que el eterno bronceado sea la clave del éxito. Ahora su compañera de profesión, Chantelle Brown-Young, sube la apuesta: el vitíligo (enfermedad que produce manchas más claras que el resto de la piel) no le va a impedir trabajar como modelo, una carrera que ha comenzado recientemente en el programa estadounidense America"s Next Top Model y que ya se augura exitosa.

02_Chantelle Brown-Young_ShaunRoss_instagram Fotos de Instagram @winnieharlow y @shaundross

3. Muerte al 90-60-90. Las escuálidas, y no exentas de polémica, medidas de gran cantidad de modelos dejan paso a mujeres reales que personifican la belleza natural, sin artificios, y reivindican el empoderamiento de las curvas. Robyn Lawley (la “supermodelo de las tallas grandes”) o Tara Lynn desafían la tiranía de las "medidas perfectas" (y triunfan). Vamos, que este año nos podemos saltar la operación biquini sin remordimiento de conciencia y orgullosos de nuestro body.

03_ROBINLAWLEY_TARALYNN Robin Lawley para Violeta by Mango y Tara Lynn en una campaña de H&M

 

4. ¿Chico o chica? Jugar al despiste ha llevado a lo más alto a tops como Andrej Pejic, que gracias a su fascinante belleza y misteriosa androginia, ha conquistado el corazón de diseñadores como Jean Paul Gaultier, Marc Jacobs o John Galliano. ¿La principal ventaja? Multiplicar por dos las posibilidades de trabajo (que estamos en crisis) desfilando en pasarelas femeninas y masculinas indistintamente. Así, modelos como Elliott Sailors, han decidido probar suerte transformando sus rasgos femeninos en un marcado look varonil apto para realizar trabajos propios de un modelo masculino.

04_ANDREJPEJICMCM_ELLIOTSAILORSINSTAGRAMAndrej Pejic para MCM y Elliott Sailors en una de las fotos de su cuenta de Instagram (@elliottsailors)

 

5. La arruga es bella. Ríos de tinta se han escrito en entrevistas y artículos divagando sobre cuál es la ocupación laboral de una modelo cuando la edad ya no le permite seguir explotando su físico profesionalmente. La incógnita puede tener fácil solución. Simplemente, la edad ya no es una barrera para desempeñar este trabajo. Y si no, que se lo pregunten a Daphne Selfe (tiene 86 años y empezó en la moda con 70) o a Jacky O"Shaughnessy, famosa por posar en paños menores y presumiendo de infinita melena gris para American Apparel.

05_DAFNE_AMERICANAPPARELDaphne Selfe para TK Maxx y Jacky O"Shaughnessy en una de las campañas de American Apparel

 

6. "Be different my friend". Puede que no consigas un puesto de trabajo de cara al público por ese pequeño tatuaje que te hiciste sin pensarlo en la adolescencia. Sin embargo, paradójicamente, en el histriónico universo de la moda, será "lo más" que lo muestres al universo entero. Sobre todo, si acompañas la pequeña mariposa del omóplato por otras decenas (o cientos) de tatuajes a lo largo y ancho de tu cuerpo al más puro estilo Rick Genest (esto es aplicable a piercings, escarificaciones, dilataciones y demás). Si das el perfil, puede incluso que te fiche Anty-Agency, una agencia londinense especializada en reclutar gente con personalidad alejada de los cánones tradicionales. 06_Rickgenest_ThierryMugler_AntyAgency A la izquierda, Rick Genest (también conocido como Zombie Boy) posando para Thierry Mugler. A la derecha, una de las modelos de Anty-Agency 7. Me duele la cara…de ser tan feo. Lo primero que viene a la mente al pensar en la palabra "modelo" es un rostro de proporciones armónicas y cautivadoras acompañado de un cuerpo de los que levantan pasiones y envidias a partes iguales. Error. Los "feos" también pueden ser modelos (de éxito). De eso se encarga Ugly Models, la primera agencia del mundo en remunerar a los feos por serlo y mostrarlo al mundo (y no lo digo yo, así se vende la propia empresa para reclutar a los rostros más "difíciles de mirar").

07DelUglyModelsDel, uno de los modelos de Ugly Models.

Clara Ferrero