Flamenca, flamenca, aplauso, corazón, cara sonriente, dedo pulgar... Así de sencilla es nuestra definición del objeto de deseo de esta semana, y seguro que nadie ha dudado cuál es nuestro sentimiento por él. Seamos sinceros, vivimos en la era de los emoticonos, las caras amarillas, los monos, los gatos, las flamencas, los dedos en uve, las cervezas brindando solas... Nos resulta más sencillo expresarnos con nuestros adorados dibujitos de whatsapp que escribir una frase completa (y ya no hablemos de frases con estructura gramatical perfecta sujeto, verbo y predicado…). Incluso podemos decir, casi con total seguridad, que no existe sentimiento alguno imposible de expresar con un emoticono whatsapp (quizás para las emociones más complejas necesitemos la combinación de dos, pero ¡nada es imposible!). La era emoji invade nuestras vidas mucho más allá de la pantalla de nuestros smartphone y hemos de decir que nos encanta el toque descarado que imprimen allá donde aparecen. ¿Y si una lluvia de oro y cristales se apoderase de nuestro móvil, y nuestro adorado diccionario de whatsapp se transformara en piezas de lujo, en pequeños juguetes-joya desvergonzados , divertidos , adorables y absolutamente únicos? Así son las piezas de Alison Lou y nosotros las acabamos de declarar nuestro nuevo y definitivo lenguaje oficial. Nuestros delicados tesoros combinan hábilmente lo efímero de la era digital en la que vivimos, y de la que jamás habríamos dicho que pudiera ser fuente de inspiración para nadie, con la intemporalidad de la joyería fina y los diseños sencillos. Porque a pesar de ese punto impertinente de todos los diseños, ninguno de ellos es excesivo ni ostentoso, todos comparten ese sutil descaro que les hace geniales. Alison Lou se inspira en su Nueva York natal para crear una colección expresiva, y tan universal como es el propio lenguaje de los emoticonos. Charms sonrientes, anillos tornillo, pendientes llorosos, pulseras plagadas de smiles… Guiños coquetos, sollozos, polos de helado, corazones… y a pesar de ello ninguna de nuestras adoradas piezas tiene el más mínimo ápice de joya infantil o tesoro teenager. Parece que la tendencia de los collares con iniciales, nombres propios y palabras inspiradoras tienen los días contados, los emoticonos no solo han desterrado al lenguaje escrito en whataspp… Definitivamente adoramos las maravillas de Alison Lou y ante ellas solo podemos decir : corazón rojo, corazón amarillo, corazón rosa, cara con ojos de corazón, gato con ojos de corazón.   Ana Horcajo @anii_horcajo