En el marco de la última edición de Paris Fashion Week, dos importantes etiquetas han estrenado dirección creativa: Chloé, con la francesa Natacha Ramsay-Levi y Givenchy, con Clare Waight Keller. Waight Keller, natural de Birmingham, abandonaba Chloé el pasado enero y era fichada por la firma liderada por Riccardo Tisci previo arranque del verano. La británica es la primera mujer que coge las riendas de la casa de Alta Costura perteneciente al grupo LVMH, dato bastante relevante tras la apuesta –también histórica- de Christian Dior por Maria Grazia Chiuri y el repunte de Ramsay-Levi. Esta última, antes de entrar en Chloé, trabajó para su amigo Nicolas Ghesquière en Louis Vuitton y Balenciaga.

 

Chloé

El debut de Ramsay-Levi en Chloé reformula los archivos de la casa. El espíritu bohemio de la etiqueta francesa, otrora dirigida por Stella McCartney y Phoebe Philo, se moderniza con el aporte de su nueva directora creativa. La primera colección de Ramsay-Levi para la firma, inspirada en la generación flower power, es mucho menos romántica de lo que cabía esperar: los trajes de chaqueta, estilo años 70, los chalecos cortos y las hombreras, por ejemplo, suman cierta crudeza al híper femenino legado de Chloé. Han contribuido sustancialmente los accesorios: botas y botines con cordones y hebillas y pendientes largos desparejados. El aire etéreo que ha reinado en la etiqueta desde su fundación queda reflejado en los estampados, inspirados en la naturaleza.

 

“Al principio, pensaba constantemente: ¿Dirán que esto es Chloé? ¿Es esta idea lo suficienemente Chloé?”, compartía Ramsay-Levi con el diario The New York Times minutos antes de celebrarse el desfile. “Ahora pienso que lo que he hecho es muy Chloé, y que también es muy yo”, zanjaba. En definitiva, la discípula de Ghesquière firma un estreno coherente con la marca repleto de referencias al Louis Vuitton de su maestro y camarada.

 

Givenchy

Tras doce años bajo el gótico del italiano Riccardo Tisci, Givenchy, por su parte, ha inaugurado una era puramente chic con Clare Waight Keller. La diseñadora se ha ceñido al clásico look parisino de los archivos de la maison salvaguardando parte de la estética que estableció Tisci durante su largo mandato. El negro, color insignia de Givenchy, ha empapado gran parte de la colección de Waigh Keller; también tonos como el rojo, el azul Klein o el amarillo mostaza, entre otros. El felino es el punto de partida de la propuesta. “Me encanta la idea de una mujer con un aire fiero”, comentó la modista el jueves en su debut. “Una persona que puede parecer ligeramente reservada, pero que tiene esa mirada serena y directa”. A destacar: el estampado de labios. En lo que respecta a la silueta, la ex directora creativa de Chloé aboga por la asimetría.

 

Waight Keller también aplaude el auge del atractivo por el far west en botas cowboy. Entre los tejidos que ha empleado para armar la muestra, resaltan el encaje, la seda y el denim. Con estos fichajes queda claro que ambas casas de moda buscan cambiar de discurso. Lo más interesante quizá sea la elección de dos mujeres para ello. Todo apunta a que la industria vive un nuevo giro a favor de la igualdad.

 

Alejandro Bernad @alejandrobernad Imágenes: cortesía de las firmas e Instagram

También te puede interesar