Hacerse con tu primer bolso de lujo es, aunque muchos no lo crean, como practicar un deporte de riesgo, ya que te lanzas a la aventura sin (casi) saber si estarás tomando una buena decisión. Es muy fácil quedarse hipnotizado cuando pasas por las avenidas más conocidas, como Serrano, Paseo de Gracia o la 5ª Avenida, y hay que tener fuerza de voluntad para no actuar por impulsos. Si quieres hacer este tipo de inversión, deberás meditar sobre qué tipo de bolso apostarás, entrando a jugar todas las cartas: ¿funcionalidad, estética o tendencia? Para aclarar tus dudas, te hemos preparado la guía infalible para acertar en tu primera adquisición de lujo.

 

1. El primer gran dilema: el color

El color es una de las grandes decisiones que nos horroriza tomar, y es que hoy en día disponemos de una gran variedad de opciones. Por un lado, los colores neutros (blanco, negro, marrón…) son básicos que perdurán en nuestro armario temporada tras temporada.

Por lo que, si nos decantamos por uno de ellos, apostaremos por una compra segura. Sin embargo, cada vez más, las grandes firmas de lujo han ido produciendo sus best sellers en varias tonalidades, decantándose por la paleta de colores pasteles como su favorita. Y es que es difícil resistirse a no coger un modelo en tono baby blue o verde pistacho, pero deberás asegurarte de que el color no te aburra y te combine con muchos de tus outfits.

2. ¿Maxi, mini o mediano?

El tamaño dependerá del uso que vayas a darle y tu forma de vida. Hazte una pregunta rápida, ¿lo vas a utilizar cada día o únicamente en momentos más especiales? Si hablamos de que quieres un bolso funcional para ir a la oficina, un bolso grande será tu mayor aliado a la hora de llevar todos tus esenciales contigo.

En cambio, si simplemente buscas un complemento que eleve tus looks en eventos o en quedadas con amigos, hazte con uno mini (pero, resultón).

3. Elige el material según la temporada

Los materiales con los que se confecciona un bolso es una de las condiciones que debemos prestar más atención. Pues, si verdaderamente queremos adquirir una gran reliquia para que nuestros hijos la hereden, tenemos que asegurarnos que cuenta con unos materiales de primera calidad.

Además, no todos los tejidos son aptos para todas las estaciones del año. No es lo mismo un capazo de rafia que sólo podrás usar en primavera-verano, que una bandolera de piel que te valdrá todo el año. 

4. Siéntete identificada con la marca 

Todos tenemos una lista de marcas favoritas, ya sea por sus diseños o su filosofía de empresa. Y si hemos tenido un flechazo con alguna de estas, hay que hacer caso a nuestro instinto. Existen clásicos en cada casa que permanecen temporada tras temporada pese al ritmo frenético de la moda.

Apuesta por uno de estos diseños infalibles y tu bolso te acompañará durante décadas.

5. No te olvides de la comodidad

Claramente, nos tiene que gustar el diseño, pero la comodidad es uno de los factores que no podemos olvidar en los beneficios de una compra de este tipo. No queremos que el bolso acabe en el fondo del armario y se convierta en un arrepentimiento. Como consejo, aquel que tiene un asa medianamente grande (y mejor aún: extraíble o regulable) es el perfecto porque te da la opción de dejarte las manos libres.

Marta Pedraza: @martapedrazza

Imágenes: Instagram 

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