¿Cómo te definirías a ti mismo? Nunca haría tal cosa.
¿Cómo te describe otra gente? Suelen decir que soy una persona agradable, pero no he reparado en estas apreciaciones.
¿Cuáles son en tu opinión las cosas más importantes en la vida? Además de las cosas básicas, imprescindibles para la supervivencia, sólo se me ocurre el ser auténtico con los demás y sincero contigo mismo.
No podrías vivir sin: ¿Además de las cosas básicas, imprescindibles para la supervivencia? Cosas tan aburridas como el café o los jerséis de punto de mil colores, ¡ah! y la música y esas cosas...
Tu ciudad favorita: Muchas. Me encanta vivir en Nueva York pero también me encanta San Francisco, justo por las razones opuestas. He estado de gira en muchísimas ciudades pero en cada una muy pocos días, cuando logro quedarme un poco más de lo habitual me empieza a fascinar ese lugar, por ejemplo Berlín. Adoro todas las ciudades, siempre y cuando no sea Viena, ese sitio me horroriza.
¿Tienes buenos amigos que también se dedican a la música? ¿Quiénes son? ¿Tengo que decir todos? Damon Palermo, Jason Letkiewicz, Leyna Noel, Jacob Long, Ari Goldman... y sigue y sigue esta lista...
¿Qué música te obsesiona en este momento? “R+B Drunkie”,“Together” de Dj Falcon y Thomas Bangalter, “Sings” de Patty Waters.
¿Por qué crees que hay personas que no bailan en los conciertos? A mi me ocurre que en ocasiones vivencio la música de una manera más íntima e introspectica aunque sea música de baile. Bailar es genial pero no debes obligar a nadie a bailar.
Eres la perfecta imagen del artista abierto de mente, tus comienzos se enfocaron al movimiento “post-hardcore” pero eso no te impidió relacionarte con otro tipo de música como la electrónica ¿Cómo rebatirías el discurso “rocker” que asegura que la electrónica no sirve de nada? Que están equivocadísmos. En el Instituto tuve la suerte de conocer a un grupo de músicos increíble y me hizo estar abierto a muchas tendencias musicales. La música debe implicar libertad. Cuanto más repitas que algo es una porquería más poder adquiere.
¿Cómo recuerdas empezar a interesarte por la música? Con 15 años recuerdo estar enganchado a Marilyn Manson, NIN y al libro “Notes from the Undreground” con esas fotos de estrellas del grunge en sus inicios. Leía cosas de Mudhoney y Sonic Youth y pensaba: ¡qué apasionante es todo esto! Empecé a leer también mucho sobre punk en mi convencimiento de que yo era punk aunque nunca hubiera escuchado este tipo de música. Así que salí a la calle y me compré el único CD de punk que podía permitirme, me costó 4 $ y se titulaba “Punk-o-Rama”, una recopilación de 18 bandas punk. Me puse muy nervioso porque no sabía si a la hora de la verdad me iba a gustar, pero me encontré con una canción mágica, ya era oficialmente punk.
¿Qué discos dirías que te han cambiado la vida y te han hecho descubrir algo? “Damaged” de Black Flag y “End Hits” de Fugazi fueron los dos grandes discos que me marcaron cuando estaba empezando. Por su intensidad y la cantidad de ideas que me suscitaron.
¿Cuáles son tus temas predilectos para una canción? Me gusta tratar temas sociales y políticos que afectan al mundo. Pero sin dar nombres ni apuntar a nadie con el dedo, hablo de cómo me siento yo ante los problemas del mundo.
¿Cómo entiendes el amor? Ummm...
Ahí va el adelanto de su próximo disco/discazo que saldrá en febrero. ¡Disfruta!
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Por Marta de la Calzada
Fotografía: Ruben Vega
SI TE HA ENCANDILADO ITAL, VISITA:
- LA GRAN HAZAÑA DE MERYL STREEP
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