Carolina Lindberg, es una mujer multidisciplinar. Desde que a los 7 años agarró su primer pincel, no se ha despegado del mundo del arte... A día de hoy, con el concepto de transformación que transmite la mariposa y la guía y protección de los ángeles, firma muchas mentes con su sello propio, el de no conformarse. 

Ahora está a punto de lanzar su primera línea de accesorios, pero antes, encuentra un rato para desvelarnos -en primicia- los secretos de su otro gran proyecto: 'Flores En La Roca'. Sintiendo por primera vez libertad total creativa, Carolina nos deleita con esta experiencia inmersiva (abierta al público del 13 al 22 de mayo en el Espacio Monbull Corner) que se traduce mediante imágenes analógicas y digitales, textiles e instalaciones. 

¿Te adentras a explorar lo tangible que puede llegar a ser el mundo imaginario con nosotros?

Carolina, cuéntanos, ¿cómo y cuándo descubres tu interés por el diseño y el arte? 

Mi interés por el arte ha estado latente desde siempre. Empecé a pintar al oleo a los 7 años y mis padres me llevaban a los museos de arte en Madrid. Por el diseño surgió más tarde, a través de la moda y sus gráficos. Fue a la hora de elegir mi carrera cuando me decanté por el diseño gráfico.

¿Cuáles son tus referentes en el área del diseño? ¿Hay algún artista en concreto que haya marcado o inspirado tu carrera?

Siendo adolescente tuve mi primer click con Pharrell Williams y su marca junto a Nigo, Billionaire Boys Club. Toda esa estética de los 2000, a la cual accedía desde MySpace en mi ordenador, me cautivó. También soy una gran admiradora de Vivienne Westwood y de Virgil Abloh, por cómo han conseguido poner en lo más alto algo que venía de subculturas, que tiene que ver con activismo y el no conformarse. 

¿Qué proceso sigues para generar tus diseños? 

Precisamente el proceso parte justo de ahí, de un “quiero lanzar este mensaje”. Después busco en mi “archivo” personal las herramientas para llevarlos a cabo. Desde hace años, he ido generando un “archivo” visual: líneas, formas, texturas, símbolos, tipografías y paletas de colores que voy combinando y al que voy añadiendo nuevos recursos. Finalmente los combino buscando el resultado final. 

Tienes un sello de identidad muy marcado. ¿Cuál fue el punto de inflexión en el que te encontraste a ti misma?

Creo que no me termino de encontrar a mí misma (risas). Un día estoy aquí, otro día estoy allá... pero creo que es precisamente de lo que va todo esto: de ir, venir y traerte algo de cada lugar para integrarlo en tu propio discurso.

Siempre he prestado mucha atención a lo que me interesa, he tratado de entenderlo y le he sido fiel porque realmente conecto con ello. Para mí todo esto va más allá de modas pasajeras, es el resultado de mis vivencias.

Lo confesamos, te hemos bicheado un poquito en Instagram y nos hemos dado cuenta que recurres bastante a dibujos de ángeles y mariposas. ¿Cobran otro significado más allá del pictórico? 

Las mariposas son el símbolo de la transformación, pero hay que entender los procesos que preceden el ser mariposa, ¡que son igual de importantes! Por otro lado, los ángeles son mensajeros que nos van dando información, guía y protección. Me interesa mucho todo el tema de las jerarquías espirituales.

Eres una artista súper multidisciplinar, ¿cómo consigues combinar tantas técnicas sin perder tu esencia?

Pienso que el haber desarrollado un estilo muy visual me permite pasar todo mi universo de una técnica a otra, lo cual me divierte mucho. 

Nos han chivado que trabajas entre Madrid y Londres. ¿De qué manera te ha enriquecido esta bifurcación laboral? 

He vivido en Londres durante 5 años, desde donde he trabajado con un amplio abanico internacional de contactos y clientes. En Madrid me siento más como en casa, más tranquila y tengo más espacio para poder trabajar en mi obra artística. Por todo esto, la combinación de ambos lugares es perfecta. 

Has colaborado con músicos, marcas de moda, revistas… ¿Cómo es trabajar codo con codo con perfiles tan diferentes? 

Necesito trabajar en proyectos distintos para no cansarme. Dependiendo de la naturaleza del proyecto y del sector, hay algunos que son más personales y gratificantes y otros que dan más resultados a nivel profesional. 

¿Te atreverías a revelarnos cuál ha sido la colaboración con la que más has disfrutado? 

¡Me cuesta bastante elegir! Trabajar con Miguel, cantante al que admiro muchísimo, y traducir sus letras con mi imaginario fue lo más. Con Héctor también fue súper guay porque, junto con nuestro amigo Horacio, creamos una colección de kits para FIFA21 y nos lo pasamos genial en el proceso. Por último, el proyecto con Bershka ha permitido que mi arte llegue a un público súper amplio, lo cual también es bueno.

¿Te han impuesto alguna limitación en alguno de tus proyectos?  

Siempre hay algún briefing al que ajustarse, por mínimo que sea, a nivel técnico, por paleta de color, temática, etc. Algunos son más libres y puedo crear algo nuevo y en otros el cliente ya tiene una idea muy clara de algo que ha visto previamente en mi trabajo. Entender el contexto es clave para que el resultado sea un éxito.

Desde Vanidad queremos darte la enhorabuena por tu primer 'solo show'. Después de colaborar junto a tantas mentes diferentes, ¿cómo nace 'Flores en la Roca'?

Precisamente al trabajar con personas de diferentes ámbitos de la industria creativa, he adquirido muchos skills y he aprendido un montón de cada uno de ellos. 'Flores en la Roca' es un proyecto muy personal en el que me siento completamente libre de hacer lo que quiera sin ningún tipo de limitación, más allá de los recursos económicos, claro. Soy yo y mi discurso.

El concepto surgió de la observación de la naturaleza en la ciudad. Algo que me fascina, porque al final nosotros hemos llegado aquí y nos hemos montado un “tinglado”, que son las ciudades donde vivimos. Tendemos a separarnos de la naturaleza y se nos ha olvidado que realmente formamos parte de ella.

Nos tienes súper intrigados, ¿nos haces spoiler de lo que podremos ver a partir de este viernes 13 en el Espacio Monbull Corner?

En la exposición podréis encontrar una instalación inmersiva que consiste en tres piezas textiles en combinación con una pieza sonora en colaboración con el productor de música club inglés, Noire, con la que hemos querido simular el crecimiento de las flores.

¡Os invito a todxs a que paséis por el espacio y lo experimentéis vosotrxs mismxs!

¿Algún otro proyecto entre manos que puedas adelantarnos? 

Siempre hay que tener un as bajo la manga (risas). Tengo muchas ideas que voy a ir materializando en mis próximas exposiciones. Además, os lo suelto en primicia: ¡lanzo mi propia línea de accesorios!

 

Sara Bosch: @sarebosch 

Imágenes: Cortesía de la artista

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