Entrevista a Bimba Bosé para Vanidad
La vida y obra de Bimba Bosé es de sobra conocida. Musa del avant-garde nacional, nieta de Luis Miguel Dominguín y Lucía Bosé y sobrina de Miguel Bosé, lo ha hecho todo como modelo. Tiene su propia banda, The Cabriolets, y ahora debuta en el cine de la mano de Sigfrid Monleón en la película “El cónsul de Sodoma”, un biopic sobre el poeta Jaime Gil de Biedma, figura fundamental de la cultura española tardofranquista. En ella interpreta a Bel, la musa de la Gauche Divine barcelonesa, dándole la réplica a un Jordi Mollà sobresaliente. Bimba, como buena musa es inspiradora. Tiene el pelo naranja, color Bowie, es alta y con una voz adictiva. Va vestida de una forma sobria en colores grises y negros y lleva una bomber. Fuma unos American Spirit que vienen en una cajetilla de color verde enfermera, el color de la colección primavera/verano de DaviDelfín. Ante la cámara es letal, inacabable, ofrece todos los colores.
Primer papel en cine. ¿Qué tal ha sido la experiencia?
Muy buena, no puedo decir otra cosa, la verdad. Sentía mucho rechazo hacía todo lo que tuviera que ver con la aparatosidad del cine, como dice Oteiza, pero me sorprendió muy gratamente. Me encantan los equipos que se crean. Es algo que siempre me ha llamado la atención, tanto en la moda, como en otras disciplinas. El cine era una materia pendiente, había tenido otras ofertas pero nunca me había atrevido.
¿Por qué te decidiste con “El cónsul de Sodoma”?
Es un proyecto que me vino hace cuatro o cinco años y creo que soy la única persona que se ha mantenido dentro desde el principio junto con el productor, Andrés Vicente Gómez. Hasta que no conocí a Sigfrid Monleón no tuve claro que quería hacer la peli. Además me parecía un buen guión, aunque es el tercer guión que he leído en mi vida con lo que no tengo mucha experiencia, pero me encanta la historia. No conocía la Gauche Divine desde dentro y el hecho de interpretar a Bel, que es una musa de su época, me pareció algo relativamente fácil de asumir para mí, o por lo menos algo con lo que me podía identificar para ser un primer papel.
¿Cómo se vive eso de ser “La Musa” de DavidDelfín y otros (entre ellos Vanidad)?
Con mucho orgullo. Es como ser un embajador, un representante de un movimiento, de un estilo…y lo llevo como eso. No sólo como un trabajo sino como algo que forma parte de ti.
¿Tienes miedo a dejar de inspirar?
No, mola también que no te miren un rato. ¡Ojala pudiera vivir esa experiencia! Pero bueno, es algo que siempre me ha hecho mucha ilusión, desde pequeña, he soñado con formar parte de grupos y movimientos artísticos.
¿Y preparaste el papel de alguna forma especial al tratarse de un personaje real?
Creo que hay que huir de eso. Desde mi punto de vista, y al ser la primera vez, lo que hice fue hacer mucho caso al director y muchas lecturas a la italiana y teatrillos. Además intenté familiarizarme mucho con los diálogos. Hicimos muchos ensayos con Jordi, con el director…
¿Conocías la figura de Gil de Biedma?
No mucho. Sé que mi tío, Miguel, es súper fanático pero me enteré después. Es muy desconocido y es curioso que un personaje tan contemporáneo, tan actual en su poesía, con un lenguaje tan directo sea tan poco conocido. Supongo que se debe a que fue un hombre muy controvertido y vivió en una época muy determinante en España y hacía lo que quería. Encima es tío de Esperanza Aguirre…
Hace un rato se te veía encantada con la música que sonaba.
Eran The XX. Estoy totalmente enamorada de ese grupo, aunque a la vez también escucho cosas más clásicas tipo Talking Heads, David Bowie, música como de la década de los ochenta y de gente a la que admiro muchísimo.
¿Por ejemplo?
¿En general? La verdad es que varío mucho. En mi familia admiro mucho a mi abuela que tiene una personalidad arrolladora y creo que nos ha marcado mucho en todos los sentidos, a mi tío Miguel... admiro a toda mi familia. Aunque hasta que no estaba el trabajo hecho no les dije nada de la peli, me moría de vergüenza. No soy muy de ir a pedir consejo ni ellos de darlo. Fuera del ámbito familiar, admiro a Woody Allen, el otro día fui a ver su última peli, “Si la cosa funciona” y me sorprendió mucho el cambio, su vuelta al Allen de siempre.
¿Y la persona que más te ha impresionado últimamente?
No sé, cada día puedo sorprenderme tanto de alguien… Por ejemplo Karl Lagerfeld, es un currante, irradia juventud a pesar de su pelo blanco.
¿Continuarás en el mundo del cine?
No lo sé, todavía no hay nada. A ver como responde la gente.
¿Y cómo va tu faceta musical?
Muy bien. Estoy encantada y me gustaría establecerlo como prioridad. A través de la música se pueden decir tantas cosas de una forma tan inmediata y tan espontánea que me gustaría crecer en este aspecto.
Por José Ganga.
Fotografía de Rubén Vega. (www.rubenvegaphoto.blogspot.com)
Realización de Miguel Cervera.
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