Aunque lo importante siempre está en el interior, como dirían en una película clásica de Disney, muchas veces el continente importa. No solo a la hora de comprar o aplicar, sino hablando en términos de coleccionismo. Cómo luce un producto influye, y mucho.

El diseño de los envoltorios y recipientes es todo un arte que trasciende el mero adorno y responde a conceptos que van más allá de lo superficial. Solo así algunas marcas han logrado labrarse una fama que las ha convertido en omnipresentes en los baños, tocadores o dormitorios de los personajes más cool. Poseer alguna de sus propuestas se ha convertido en un hecho paralelo al de tener una obra original, una primera edición de un libro o un bolso exclusivo.

Un ejemplo paradigmático sería el de Byredo. Su fundador y director creativo, Ben Gorham, exponía su punto de vista con motivo de la presentación de su línea de maquillaje, que ha desatado el mismo furor al que nos tiene acostumbrados: "La historia del color y la alta calidad de los materiales son elementos esenciales, pero también lo son los objetos que contienen los cosméticos. Los tocas, juegas con ellos y los llevas encima. Estos objetos son tangibles, personales y sensuales. Por eso es un proceso de diseño delicado que requiere facilidad y sensibilidad. El cierre, el ruido, el imán..."

No podría haber capturado mejor esa filosofía de marca, cuyas inquietudes rayan en el arte quedando así plasmadas en frascos, compactos o botellas dignas de gabinetes de las maravillas. ¿Cosmética u objeto de diseño? Cuando se habla de estas marcas, es en términos de coleccionismo. ¡Hazte con todas!

Imagen: @chanel.beauty

 

En Chanel podríamos hablar de diferentes iconos que, por su forma, han quedado en el recuerdo. Desde el flaçon icónico de su perfume Nº5 hasta la crema de manos más visible en Instagram, muchos son los productos de la maison que han despertado pasiones.

Sin embargo, a la hora de atesorar, debemos destacar Le Vernis, el esmalte de uñas contenido en un bloque sobrio, de líneas rectas y escasa grafía, coronado por un contundente tapón negro. No hace falta logo ni descripción, lo que se busca es alinearlos, combinarlos y crear diferentes paletas de color con su amplia variedad.

Imagen: @officialbyredo

 

Byredo mira al pasado, pero traduce a un lenguaje rabiosamente moderno a la hora de conceptualizar su línea de maquillaje. El estuche de cinco sombras de ojos, -por quedarnos con una de sus propuestas-, es una auténtica celebración de los compactos clásicos con una vuelta de tuerca. Inspirado en la silueta de una gota de lluvia y la ondulación que produce al entrar en contacto con el agua, cuando tienes esta paleta solo te apetece admirarla.

En su interior hay tres combinaciones de sombras en polvo con diferentes acabados, siendo nuestra favorita Syren, por esa mezcla de dulzura y carácter en la selección de tonos, que recuerda a los famosos seres acuáticos de la Odisea.

Imagen: @aesopskincare

 

Te proponemos un reto. La próxima vez que veas una película ambientada en un baño, que no sea de época, intenta no encontrar una botella de Aesop. Complicado porque la marca australiana centra sus esfuerzos en fórmulas naturales, pero especialmente en el diseño reconocible de sus productos y de sus tiendas.

Entrar en ellas es entrar en un universo del buen gusto y el bienestar... y trasladarlo a casa es tan fácil como hacerse con su reconocido Tónico Antioxidante de Perejil o su Gel de cuerpo de Geranio.

Imagen: @exnihiloparis

 

La ideología tras esta casa perfumera independiente se condensa en el término avant-garde. No en vano, detrás de EX NIHILO se encuentran tres franceses que querían experimentar y crear aromas provocativos, retomando el espíritu optimista de las grandes invenciones galas como el Concorde.

Para contener esas propuestas se inspiraron en el arte del cristal, el diseño y la arquitectura, dando lugar a unos recipientes inspiradores y sensoriales con un pesado tapón dorado labrado (que en el servicio de personalización disponible en algunas tiendas puede ser customizado con las iniciales) y un cuerpo funcional, que muestra el nombre de cada aroma en transparencia. Merveilleux!

Imagen: @guerlain

 

Guerlain cuenta con productos muy coleccionables, mención especial a sus Aqua Allegoria, pero nosotras nos quedamos con un labial que, año tras año, permite ser personalizado con carcasas nuevas y aún más espectaculares.

El Rouge G es esa barra que sacas del bolso cuando quieres dejar impresionada a tu compañía. Sofisticada y suntuosa, es un clásico del maquillaje diseñado por el joyero Lorenz Bäumer, con un espejo doble plegable en un formato súper compacto que recuerda a una bala.

Imagen: @westmanatelier

 

Tras su paso por las más destacadas revistas, marcas y pasarelas, en 2018, Gucci Westman, por fin hizo caso a sus fieles y lanzó su marca homónima. Sus productos son de líneas orgánicas, refinadas, pero con ese toque natural y nada complicado que emana su persona.

Ahora nos pone los dientes largos con el reciente lanzamiento de su colección de brochas en colaboración con Skultuna, una marca joyera fundada en 1607 y vinculada a la corona sueca. Con toques dorados en los mangos y cubilete, resulta un conjunto tan deseable que dudamos si llegaríamos a usarlo o iría directo a una vitrina.

Imagen vía: patmcgrathreal

 

Saltamos a otra firma de maquilladora profesional, en este caso de la Dama del Imperio Británico y Madre de maquilladores: Pat McGrath. La inglesa es un referente incluso cuando dispone sus productos, gracias a fórmulas hiper pigmentadas y conceptos originales.

Su última colección, Heavenly hues, es algo más romántica, con flores y tonos encarnados, pero mantiene el inconfundible diseño del MatteTrance, un labial mate delicioso en un estuche decorado con unos labios entre surrealistas y noventeros a lo Solange Azagury-Partridge.

 

Berta Almagro: @bertalmagro

Imágenes: Cortesía de las firmas