El arte y la moda han ido siempre de la mano, y su relación llega hasta tal punto, que no podrían convivir hoy en día la una sin la otra. A partir del siglo XIX, con los avances técnicos y el progreso en las sociedades, la moda empezó a apreciarse como algo más. Empezó a verse como referente de estatus y a estar asociada a la cultura y al arte. Se huía del corsé y se buscaba libertad en los cuerpos femeninos. Los primeros en afrontar el diseño de moda en este campo fueron Gustav Klimt y Emilie Flöge, compañera del artista. Ambos crearon amplias túnicas para hombres y mujeres inspiradas en los principios liberadores del modernismo. A estos primeros artistas se le suman detrás muchísimos diseñadores míticos de la historia de la moda hasta los más actuales. Una inspiración siempre latente. La diseñadora Elsa Schiaparelli creó el vestido langosta, el vestido lágrimas y el sombrero zapato junto al artista surrealista Salvador Dalí. El pintor de Cadaqués a su vez, también diseñó portadas para la revista Vogue y colaboró con otros diseñadores como Christian Dior. (Quien vestiría a su musa Gala hasta el último día de su vida por órdenes expresas de Dalí). El arte y la moda iban de la mano y juntos atravesaban un camino en el que se volverían inseparables. De hecho, en uno de los momentos más importantes para los diseñadores (la elección del color de temporada) escogido por el instituto del color, se fusionan ambas disciplinas marcando un recorrido para las próximas colecciones. Muchos referentes en moda han comentado al respecto, como por ejemplo Giorgio Armani:
“Por supuesto, la moda es arte. La relación entre estos universos es muy estrecha. Ambos son medios de expresión de gran potencia, que crean objetos no solo bellos, sino también capaces de emocionar. De hecho, la industria de la confección se sitúa en el centro de la creatividad y es el mejor espejo de la sociedad y su cultura”.
Uno de los diseñadores que más colaboraciones ha realizado con el mundo del arte es Yves Saint Laurent, del cual se han recogido en exposiciones todas las muestras que realizó, un referente. Yves Saint Laurent y Mondrian crearon un tándem perfecto, para el propio Saint Laurent el arte era algo inspiracional y reflejo de sus creaciones. Una de ellas sería el famoso “vestido Mondrian” inspirado en la corriente del neoclasicismo y en la obra “Composición II; composición con azul y rojo” del pintor holandés Piet Mondrian. Es una obra simple, al igual que el lienzo del pintor holandés, pero con muchos matices. A Mondrian le abanderó la abstracción en el arte y sería Saint Laurent quien fuera precursor de subir ese arte a la pasarela:

“La moda no es un arte pero para dedicarse a ella hay que ser artista” - Yves Saint Laurent.

Pero no se quedaría solo en Mondrian, Yves Saint Laurent colaboraría con otros artistas entre los que encontramos a Picasso (con un capa inspirada en las guitarras que el pintor plasmó en muchos de sus lienzos). También con Wesselman (un vestido negro que dejaba el protagonismo en el cuerpo femenino, centro de las piezas del artista). Se sumaron a esta ola de moda y arte Van Gogh y Rodarte (incluyendo un vestido en la colección de primavera con el estampado de “La noche estrellada”.) Picasso y Jil Sander se unieron para presentar un jersey de manga francesa inspirado en una de las piezas de cerámica de Pablo Picasso. Andy Warhol y Versace le darían el toque más pop art con una prenda inspirada en los característicos retratados de Marilyn Monroe firmados por Versace.

 

Por su parte, también encontraremos en algunos modistas reputados la inspiración a la hora de crear sus piezas o incluso desfiles: Dolce&Gabanna se inspiró en los mosaicos de la Catedral de Monreale de Sicilia para su colección otoño-invierno de 2013 y el ‘Retrato de Adele Bloch-Bauer I’ de Gustav Klimt inspiraría a Dior para la creación de su colección primavera-verano en alta costura en 2008.

 

¿Los más recientes? Lichtestien y Converse reintentaron la tendencia pop art e inspiraron la creación de la edición especial de las zapatillas Converse; Stella McCartney en 2017 quedó encandilada de “Un caballo asustado por un león” de George Stubbs, Lous Vuitton ha colaborado con el artista pop Jeff Koons y a nivel nacional Agatha Ruiz de la Prada se inspiró en los bigotes de Salvador Dalí para algunas de sus creaciones. Moda y arte funcionan como una perfecta simbiosis que lejos de restar, suman al territorio de la creatividad para elevarlo a un sin fin de posibilidades. Estas son algunas de las colaboraciones que hemos querido resaltar, pero estamos seguros que llegarán muchas más.

 

Irina Alegre – @irinadada7