Un decorado de miedo. ¿Truco o trato?
Un decorado de miedo. Calabazas, flores secas, telas de arañas y gatos negros. Elementos fantasmagóricos para celebrar la noche más terrorífica.
Cada año somos más los que la noche del 31 de octubre nos disfrazamos y maquillamos para disfrutar de la noche de Halloween. La elección del personaje y la caracterización es esencial: sangre, ojeras, palidez, etc. No menos importante es preparar nuestras casas para tal escalofriante celebración, ya que la decoración es fundamental en la Víspera de Todos los Santos.
La leyenda cuenta que la noche de Halloween las almas tienen permiso parar abandonar el cementerio y vagar por las calles atemorizando a los vivos. Amenazan con sus malévolos conjuros si no se accede a sus peticiones. ¡Truco o trato! Para despistar a zombis y fantasmas la clave está en camuflar nuestras casas de manera que parezcan lugares abandonados, sin rastro de vida humana.
Es fundamental por lo tanto decorar jardines, puertas y ventanas para evitar así la visita de las almas errantes. Ramas, flores secas y harapos harán que nuestras fachadas luzcan con aspecto sobrecogedor, como embrujadas. En Sally Hambleton for The Workshop Flores nos proponen coronas de paja con frutos de otoño para la puerta. También han preparado enormes calabazas llenas flores de temporada, para colocar en el jardín o en el alfeizar de la ventana por ejemplo.
La calabaza es el elemento estrella en todas su versiones. La más tradicional, vaciada tallada y con vela en su interior. Aporta así la iluminación tenue y tintineante deseada para este decorado de misterio. Jugar con la luz, las siluetas y las sombras será un gran recurso para crear un ambiente estremecedor.
En el interior los animales se apoderan del espacio: arañas, murciélagos y cuervos sustituyen a los vivos. No pueden faltar gatos negros, disfraz que toman las brujas para pasar desapercibidas. Cubriendo los muebles con sábanas blancas conseguiremos una apariencia fantasmagórica. Como las letras están de moda, podemos utilizarlas para mandar mensajes inquietantes. En Pinterest podéis encontrar estas ideas y mucha inspiración para lograr un decorado terrorífico.
Si con todo esto no conseguimos espantar a los monstruos, hay que estar preparados para sortear sus trucos eligiendo trato. En la noche de Halloween es imprescindible un buen surtido de dulces para agasajar a nuestros temibles visitantes. En Lore"s Bakery nos sugieren cupcakes de ojo, calabaza y calavera mejicana, galletas de fantasma y gato, y los tradicionales candy corn americanos. Sorprenderéis hasta al fantasma más intrépido. ¡Feliz y terrorífica noche de Halloween!
Inés Garp (@InesGarp)