Rizos de diez, como en la pasarela de Diane von Furstenberg
Diane von Furstenberg ha llenado su último desfile de melena leoninas donde los rizos son protagonistas. Así debes cuidar los tuyos
Pero rizado de verdad, con todos sus dramas: sus encrespamientos, sus cutículas levantadas, su electricidad estática y su sequedad. Los cabellos rizados naturales no son fáciles de domar, pero cuando lo consigues, no cambias tu melena por nada. Y eso es precisamente lo que ha debido pensar Diane Von Furstenberg, que en su último desfile durante la actual New York Fashion Week P/V 2016, rendía homenaje a los años setenta, a su eterna melena leonina y a sus fiestas en Studio 54.
En la pasarela, todas, absolutamente todas las modelos presumían de rizos y de voluminosas melenas. Una tendencia que se perfila como cien por cien apetecible para la próxima temporada. La pregunta ahora es: ¿Cómo vas a mantener tus rizos bajo control? Aquí tienes algunos consejos para sacarles partido y presumir de pelazo:
1. El poder de las recetas caseras. Aunque te encante cómo huelen los productos cosméticos, y aunque muchos de ellos realmente sean efectivos, de vez en cuando no está de más abrir la nevera y ponerte creativa. Elige un domingo de lluvia, de esos en los que decides quedarte en casa a mimarte y prepárate una mascarilla. Puedes mezclar aceite de oliva y miel. Es sencilla, asequible y sus efectos son inmediatos, ya que el nivel de hidratación que consigues con estos dos ingredientes es perfecto para que tu cabello pese menos, se rice más, adquiera brillo, suavidad y no se encrespe.
2. Procura utilizar toallas de microfibra para secar tu pelo y, sobre todo, nunca lo frotes o aumentarás el encrespamiento. Mejor opta por suaves movimientos, apretando ligeramente para eliminar el exceso de humedad. Ten en cuenta el mismo consejo durante el lavado: realiza movimientos suaves, como si te estuvieras dando un masaje y repite la operación un par de veces si es necesario.
3. La clave es la hidratación. Si estás harta de aplicarte mascarillas sin obtener resultados, cambia la dinámica. Desenreda tu cabello y aplícala en la melena seca, envuélvelo en una toalla y déjala puesta todo el tiempo que puedas -hasta una hora-. A continuación lava el cabello con suavidad. Así, al dejarla actuar en seco y durante más tiempo, sus beneficios se multiplicarán.
4. No tengas miedo a teñirte. Estamos de acuerdo en que debes huir de los tintes que contengan amoniaco, ya que abren la cutícula de una manera muy agresiva para que penetre el color, y esto perjudica especialmente a los cabellos rizados, que tienden a presentar una cutícula peor sellada que los lisos. Sin embargo, los tintes libres de amoniaco emplean agua para abrir el cabello de manera más suave, y por tanto puedes jugar con el color a tu antojo.
5. Cuidado con el sol. Llevamos años concienciándonos de la necesidad de utilizar protectores solares para nuestra piel, pero todavía no hemos caído en la cuenta de que el pelo también sufre -se seca y envejece a causa de los rayos solares-. En la playa y en la piscina, o incluso si has planeado una caminata por el campo o una jornada de running, debes proteger tu melena. Elige el producto que más se adapte a tus necesidades: Moroccanoil, Kérastasse, L"oreal... Hay decenas de marcas que ya incorporan este tipo de cuidado para tu cabello.
6. Busca un lugar donde te comprendan, como la inagotable fuente de sabiduría para toda mujer con cabello rizado que supone la web naturallycurly.com. Aquí encontrarás todos los trucos que necesitas, averiguarás cosas sobre la textura de tu cabello y los cuidados que necesita -porque no todos los tipos de rizos son iguales-.
7. Huye de los productos con siliconas. Lo primero es detectar si tu champú o tu acondicionador las lleva. Mira la lista de ingredientes y permanece atenta a las palabras que terminen en -con, -cono, -cone o -xane, porque todas ellas son siliconas, es decir, polímeros inorgánicos que hacen que tu cabello no respire. En un primer momento el resultado puede parecerte bueno, ya que crean un falso efecto de fijación, pero al dificultar la oxigenación del cabello hacen que se reseque y que los rizos terminen por abrirse.
8. No abuses de las espumas. Hace diez años era prácticamente el único producto indicado para fomentar el rizo y fijarlo, pero hoy en día existen muchas texturas más recomendables. Tampoco tienes que desterrarlas de tu arsenal de belleza, pero intenta usarlas menos, ya que a la larga resecan el cabello. A diario puedes utilizar una crema de peinado como las de la línea Be Curly de Aveda, que además de aportar fijación y potenciar el rizo mientras lo mantienen bajo control, hidratan tu pelo.
9. Ojo con el difusor. Si lo tienes bajo control y te da buen resultado secar tu cabello con secador y emplear un difusor, adelante, pero si no estáis hechos el uno para el otro, no te empeñes. A veces es preferible potenciar el rizo dándole forma con las manos y dejar que se seque de manera natural, ya que si tu cabello es demasiado seco, el secador sólo empeorará el resultado.
10. Cuando todo lo demás falla, y si se trata de una ocasión especial, puedes usar un rizador de pelo -eso sí, siempre aplicando antes un buen protector de calor para no dañar el cabello-. Puedes emplearlo para abrir el rizo y obtener un efecto ondulado, en este caso no es necesario que enrosques todo el mechón en torno al rizador, con darle una vuelta es suficiente. También puedes darle un ligero toque a las puntas con él para que adquieran movimiento.
Arancha Gamo @arancha_gm