Con motivo de la presentación al público de la nueva colección p/v 2012 "El triángulo de las bermudas" de El colmillo de Morsa - mañana 12 de Abril, en la Librería/Galería Mutt de Barcelona- en Vanidad, hemos querido hablar con sus creadores para que nos cuenten un poco de todo. ¿Fuisteis desde el principio Jordi Espino y Elisabet Vallecillo? ¿Cómo os conoceis?  Nos conocimos en la universidad, allí fue donde surgió nuestra relación de amistad que más adelante sería también profesional. ¿Cuándo surge la idea de unir fuerzas para crear algo juntos? Poco después de terminar la carrera. Inicialmente realizamos pequeñas colecciones aunque sin saber muy bien cuál era el rumbo que queríamos tomar; en seguida nos dimos cuanta de que queríamos dedicarnos por completo a nuestra marca. ¿Hacer algo propio -en moda- es la única forma de trabajar en algo real? Es el camino más directo, aunque no el más fácil. Trabajar en un proyecto propio obviamente es muy enriquecedor, sobre todo el hecho de tener total libertad creativa y poder decidir hacia dónde te diriges. ¿Que inquietudes ecológicas/medioambientales teníais antes de fijar vuestras premisas con la marca? Es un tema que siempre hemos tenido muy presente, aunque nuestra filosofía hace más hincapié en lo que se refiere a los modelos de consumo actuales. Creemos que nuestra sociedad no necesita sumar más en cantidad, sino en calidad. El modelo actual de consumo excesivo casi compulsivo es poco sostenible, tanto en lo que se refiere al medio ambiente como en lo económico; no creemos que la moda deba ser caduca para generar su consumo, es más interesante trabajar en algo atemporal y perdurable y descartar las teorías de la obsolescencia. Nuestro producto, además de apostar por los tejidos naturales, se fabrica íntegramente en España prestando apoyo a un mercado sostenible que se aleja de las producciones en serie y la mano de obra barata. ¿Porqué "El colmillo de Morsa"? Porque define muy bien parte de nuestro pensamiento. Es una reflexión en cuanto al concepto de belleza. El nombre de la marca esconde nuestra primera premisa, y es que la belleza tiene formas infinitas y puede encontrarse en cualquier lugar. ¿Habéis encontrado el nexo perfecto entre la tradición y la modernidad? Intentamos equilibrar la balanza. Nos encanta rescatar los principios artesanales e incluirlos en detalles de nuestras colecciones. El hecho de trabajar conjuntamente con pequeños talleres hace que la mano del artesano esté siempre presente. El diseño escandinavo es para vosotros una clara influencia ¿Qué rasgos adoptáis en vuestras propias colecciones? Tomamos como modelo el "buen hacer" de la moda Escandinava en lo que se refiere al proceso de diseño propiamente dicho. El proceso de investigación, el valor por los materiales, la sencillez y funcionalidad... es algo que reside en todas nuestras creaciones. ¿Cuál es el nexo de vuestras colecciones? Siempre hay un punto de referencia hacia los elementos naturales y una historia que guía el desarrollo de la colección. Optamos por líneas que respeten la fisionomía natural de los cuerpos, por prendas polivalentes e incluso unisex, por los diseños y detalles muy cuidados. ¿Con qué nos vamos a encontrar en ésta nueva colección -"El Triángulo de las Bermudas"-? Con prendas vaporosas y cómodas, detalles bordados, plisados. Gasas y rasos de seda, prendas de celulosa regenerada, algodones, ante, piel... ¿Cuáles son vuestros límites materiales? Lo cierto es que aunque nos decantemos por el uso de géneros naturales  en mayor medida, también optamos por otro tipo de artículos siempre que sean de calidad y puedan ofrecernos otras prestaciones. Si quieres indagar más en el exquisito trabajo de éstos dos jóvenes emprendedores no dejes de visitar  www.elcolmillodemorsa.com     Por Yelena Smith