Hubo un tiempo en que Yayoi Kusama era la chica de moda del movimiento pop-art neoyorquino, cuando sólo la genialidad de Andy Warhol superaba en trascendencia a su psicodélica extravagancia. La artista viva más relevante de Japón, ahora de 84 años, reside en un psiquiátrico desde hace  tres décadas, porque así lo decidió ella misma, no obstante su obsesión por los puntos contagió a otras figuras importantes, entre ellos Marc Jacobs. El diseñador artístico de Louis Vuitton, gran admirador de la japonesa, reinterpretará sus obras más emblemáticas y diseñará mano a mano junto a ella varias instalaciones para los escaparates de todas sus tiendas alrededor del mundo, que se presentaron por primera vez el pasado martes 10 de julio en la Maison Louis Vuitton de la 5ª avenida de Nueva York. La instalación vistió una fachada con los emblemáticos topos a tamaño gigante por toda la avenida neoyorquina. La revelación de los escaparates coincidió con la inauguración de la exposición dedicada a Kusama en el Whitney Museum of American Art, retrospectiva a la que se ha asociado la firma Louis Vuitton y que ya pasó por el Museo Reina Sofía de Madrid en mayo de 2011, por el Centro Pompidou de París o la Tate Modern de Londres. No quisieron faltar a la inauguración otras women-in-the-arts como Sofia Coppola, Diane Kruger y su pareja Joshua Jackson o Dianna Agron.   Por Amanda Cámara