Fred Savage comenzó su carrera de actor con 9 añitos en la telévisión, en diferentes espacios como “The Twilight Zone”, pero es en 1987 cuando se convierte en el nieto del abuelo que cuenta la historia de “La Princesa Prometida”. Un año más tarde llegaría lo que sería el papel de su vida. Es en 1988 cuando comienza la emisión de “Aquellos Maravillosos Años”, donde Kevin Arnold adulto, nos relata su particular visión de su vida como preadolescente en los años sesenta: un amor tierno desinteresado por Winnie Cooper, la supervivencia a la familia y la compañía de su leal amigo nerd Paul. Que no, no lo es, no es Marilyn Manson. Después de semejante triunfo en televisión, primer actor de 13 años nominado a los Emmy y a los Globos de Oro dos veces, el joven Fred decidió ponerse en serio con su vida y evitar una juventud típica de las estrellas jóvenes. Con los pies en el suelo, como el Kevin que todos conocimos, se dedicó a estudiar y configurar su vida personal. Esto lo haría compaginándolo con algún que otro trabajo en televisión sin relevancia. En 1999 se licencia y comienza su carrera como director en televisión, una televisión un tanto infantil. Dentro de los títulos encontramos “Hannah Montana” ya que las cadenas para las que más trabaja son Nickelodeon y Disney Channel. De una serie saltó a otra, y de esta otra a un telefilm, y de éste a otra serie. En este ámbito se mueve como pez en el agua. Aunque en su faceta como productor lo encontramos en “2 Broke Girl”. Bien por Fred. En la actualidad, padre de dos hijos, vive feliz el recuerdo de la serie que lo único que le ha dado han sido alegrías. Tiene la vida que quiere y está donde quiere. Por cierto, pone voz a diferentes dibujos y ha sido voz en off en diferentes ocasiones. Como aquella que salía de la tele para hablarnos de los años mozos de Kevin. Ahora los hijos cierran el círculo. Ahora ya tiene del todo sentido. En el momento en el que Fred les cuente aquellos maravillosos tiempos en los que rodaba aquella maravillosa serie. Raúl Rustarazo