En un recorrido de cinco años, el diseñador Eduardo Navarrete ha forjado una identidad de marca distintiva y altamente reconocible. Su enfoque innovador, con técnicas como la estampación digital, junto con una visión audaz en la presentación de sus colecciones, ha dejado una huella persistente en el mundo de la moda.

Hoy, el diseñador se encuentra en un punto de inflexión crucial con el lanzamiento de su última colección, "NVRRT 10.1", un conjunto de diez piezas de alta moda que, sin duda, marcan un hito en su carrera.

El pasado 12 de septiembre recorrimos los señoriales pasillos del Palacio de los Duques de Santoña, donde se llevó a cabo la presentación y tuvimos la oportunidad de conocer más sobre este cambio significativo en la narrativa de Eduardo Navarrete.

Y es que, por primera vez, la moda casual que le define cede su lugar para dar paso a la alta moda, donde la mujer que encarna la colección es una figura de elegancia y sofisticación, representando un nuevo capítulo en su viaje creativo. No te pierdas nuestra charla con él, a continuación:

En la carta de presentación hablas de los cambios y desafíos como declaraciones de intenciones. ¿Qué mensaje o declaración esperas transmitir a través de tu colección 10.1?

Pues en esta colección lo que queríamos mostrar era otra faceta mía como diseñador y algo diferente de lo que habíamos hecho hasta ahora. De hecho, es una colaboración con cristales de Swarovski porque queríamos darle un toque sofisticado a este nuevo y, por el momento, último lanzamiento.

Todo el tiempo que antes invertíamos en hacer los estampados que tanto caracterizan a la marca Eduardo Navarrete, en este caso lo hemos invertido en confeccionar meticulosamente y crear volúmenes y formas a la vez que investigábamos más en patronaje.

Tu última colección es totalmente distinta a tus anteriores trabajos. ¿Qué novedades nos presentas en cuanto a la confección o a los materiales y tejidos?

En esta colección hemos elegido una serie de tejido nobles como el terciopelo, muaré, rasos, jacqares y pluma, mucha pluma. Sobre todo pluma nacional como son las plumas Fercan.

Todos estos materiales han creado figuras arquitectónicas que daban un giro de 180 grados a todo lo que habíamos presentado hasta ahora.

¿Cómo ha sido el proceso creativo y colaborativo junto a Swarovski?

Creo que todo el mundo conoce mis referencias e inspiración directa del cabaret, desde Tania Doris hasta Celia Gámez, y trabajar con Swarovski me ha permitido plasmar mis referentes con esa maravilla de cristales que elevan un look siempre.

Tus puestas en escena son tan importantes como las prendas en sí. ¿Por qué has elegido el Palacio de los Duques de Santoña como escenario para tu presentación?

Hemos elegido el Palacio de Santoña porque al final no deja de ser una manera de sorprender y a mí me encanta hacerlo. Nuestra forma de presentar los desfiles siempre ha sido una manera muy disruptiva: desde en un supermercado con los modelos sobre carritos, hasta una pista de patinaje… Y ahora nos apetecía hacer algo diferente, no para el resto de marcas, pero sí para nosotros.

¿Por qué en '10.1' vemos los looks en maniquíes y no en modelos?

Por sorprender una vez más. Nuestra filosofía es siempre la innovación y poder crear una expectación en las personas que vienen a ver esta colección… Al final una presentación sobre maniquí es una cosa que habían hecho muchos diseñadores anteriormente pero para nosotros era algo nuevo y poco común y eso creo que ha gustado y sorprendido mucho.

Hablas de mantener la esencia de Navarrete en esta nueva colección. ¿Cómo mantienes tu identidad como diseñador mientras exploras nuevos estilos y formatos?

Este era el reto importante. Veníamos de hacer algo muy personal e identificativo con la marca, pero esta vez nos hemos atrevido a hacer algo opuesto, aunque si alguien conoce bien la marca verá siluetas que se repiten año tras año.

Sabemos que te entusiasma trabajar con celebridades y que ellos y ellas están encantados de participar en tus desfiles, pero ¿con qué socialité sueñas con colaborar en un futuro?

Para mí ha sido un sueño poder vestir a Bibiana Fernández, Rossy De Palma, Asier Etxeandia, La terremoto de Alcorcón e incluso a Quevedo… Nunca me imaginé que viniendo del pueblecito del que vengo iba a conseguir esto y estoy muy emocionado por ello.

Sin embargo, a la musa a la que me encantaría vestir es Nieves Álvarez, considero que es un icono en la moda y nuestra modelo internacional más top.

Como ejemplo perfecto de diseñador joven que se ha hecho su hueco en mundo de la moda, ¿qué consejo les darías a los diseñadores emergentes que están tratando de hacerse un nombre en la industria?

Si tuviera que dar un consejo a una persona joven o al Eduardo de los inicios le diría: "No preguntes tanto, sigue tus propios impulsos". Si tienes clara una cosa debes seguir tu camino.

Está muy bien saber las opiniones de los demás, pero sin que eso interfiera en lo que de verdad tú quieres hacer. Y, sobre todo, para trabajar en la moda y en la vida en general, hay que echar muchas, muchas horas...

¿Qué le depara el futuro a Eduardo Navarrete después de esta colección?

El futuro está lleno de proyectos, tanto en el mundo de la comunicación con mi central de marcas y creadores ‘15 Segundos’, donde damos cobertura a jóvenes diseñadores y marcas e impulsamos su carrera, como en el aspecto televisivo y otras sorpresas que no puedo contar pero que muy pronto saldrán a la luz…

 

Enrique Castro: @ennriccr

Imágenes: Cortesía de Swarovski