El alga es un alimento poco común, quizás por nuestro desconocimiento sobre él. Lo cierto es que contienen muchísimos minerales procedentes del propio meido marino, lo que convierte a las algas en un perfecto antioxidante. Si no te agrada demasiado el sabor a mar, te recomendamos que las mezcles con alimentos que tengan bastante fuerza y así resulte menos fuerte su sabor. Semillas de Chía Un alimento de los más versátil y combinable, a penas tiene sabor, por lo que no altera el gusto natural de las recetas, puedes usarlo tanto en platos salados como dulces y sus beneficios son muchísimos. Son perfectas para controlar el apetito, pues su consumo aumenta nuestra sensación de saciedad, absorben hasta diez veces su peso en agua, con lo cual nos mantienen hidratados. Aumentan nuestra energía debido a su alto contenido en potasio y proteínas. Polen
Sí, tal cual lo lees, el polen de las abejitas. Encimas, vitaminas y minerales hacen del polen un complemento alimenticio perfecto para reforzar nuestro sistema inmunológico. Puedes probar a incluirlo en postres como pudin de frutas o batidos ;) Espinacas Las verduras de hoja verde, en general, son muy beneficiosas para nuestra salud. Hemos escogido la espinaca porque en fácil de combinar a la hora de preparar muchas recetas. Es un alimento rico en betacaroteno -antioxidante y ayuda a prevenir el cáncer- y vitaminas B, C y E. Bayas de Goji Es casi como comer bocaditos de juventud, estimula la hormona del crecimiento, ayuda a mantener una buena vista, y aporta muchísima energía para sentirnos vitales.
Paula Morón - @paulamoji