La humanidad tiene cosas buenas. Construimos las pirámides, levantamos Roma, y creamos el iPhone. Pero tampoco andamos cortos de mal gusto (¿calcetines con dedos? Anda hombre). Como 2013 supone un borrón y cuenta nueva, vamos a intentar que el mundo sea un lugar mejor y, para ello, proponemos 13 modas odiosas que han desaparecer (para siempre).
1. El sinsentido de los bigotes. Hay bigotes en las copas de champán, también en las camisetas, incluso TATUAJES DE BIGOTES EN LOS DEDOS. Una regla no escrita bien sabida por todos es que algo que está tan omnipresente no es divertido, pero es que ni siquiera sería divertido en un principio. Es vello facial, superadlo.
2. La fiebre por la palabra “bizarro”. No, modernos del mundo y blogueros con ínfulas, "bizarro" no es sinónimo de extraño. Por favor, buscad su significado en la RAE.
3. Los Instagram plagados de fotos de comida. ¿Te acuerdas cuando, allá por 2003, la gente se iba a un restaurante, pedía comida y se la comía? Pues, al parecer, esa costumbre se perdió. Ahora todos tus amigos tienen que ser partícipes de las cosas que te llevas a la boca, y parece que es más importante el momento foto que el disfrutar de una comida en sí. Por cierto, que hay muchísimas fotos que son horribles gracias al filtro y donde nada parece apetitoso. Dicho queda.
4. Hacerte fotos con el iPad (!) ¿Tienes idea de lo ridículo que es ver a alguien sacándose una foto con el ciclópeo artefacto de Apple? En serio, coge el teléfono y hazte una foto haciéndote una foto con el iPad. Y pregúntate quién diantres iba a someterse a sí mismo a semejante ridículo.
5. Creer que por añadirle una palabra al tuit de otro te estás haciendo el interesante. El País tuitea un titular rompedor. "España entra en quiebra técnica". "Malú reniega de "La voz". Algo así. Acto seguido, cinco mil listillos deciden propagar su santa pereza mental copiando exactamente el mismo tuit y añadiendo su impagable introspección: "Interesante". "RT". ":)". "País". O, en el caso más grave: "+1". ¿En serio? ¿Para ESO te has abierto una cuenta en Twitter?
6. Las cuentas parodia de Twitter. Sí, todos nos hemos entretenido alguna vez con los tuits parodia de determinados personajes. Es una buena idea y hace chiste al principio. Como el @putohelicoptero que el Gobierno manda a sobrevolar Malasaña cada noche que hay una manifestación y que obliga a velar a pseudo-
hipsters, unidos ahora contra el enemigo común. Pero en el momento en que uno se entera de que existe una cuenta del BIG BEN, se da cuenta de que algo no marcha bien. Un ejemplo al azar de sus tuits: “BONG BONG BONG”. Gracias, Twitter.
7. Plagar el Facebook de absurdas quejas pseudo-políticas. ¿Os habéis enterado de que España no está atravesando su mejor momento? ¿No? Será que tienes Facebook y o eres ESE afortunado que no tiene amigos que se han sumido al
zeitgeist pesimista y aprovechan para culpar a la situación de absolutamente todo lo que pasa en sus vidas. Basta ya de plantar el
hashtag #asimarchaespaña cada vez que el metro llega tres minutos tarde.
8. Los pósters “Keep Calm and…”. ¿De dónde salió esta moda? El original “Keep calm and carry on” servía para levantar la moral en Inglaterra durante la segunda guerra mundial ante el miedo del ataque nazi. ¿Se puede saber por qué razón cuelga en tu habitación?
Keep calm and súperalo, anda.
9. Esa moda de los cantantes por denominar a los fans de determinada manera. Véase: Little monsters (Lady Gaga), Barbies y Lens (Nicki Minaj), Beliebers (Justin Bieber), y un largo etcétera. Es como si estuvieras creando especies con las que poblar la Tierra Media y luego tener rencilla entre ellos. ¿Podemos volver a llamarlos fans, a secas, en 2013? ¿Por favor?
10. Los cascos de 300 euros. Ver unos cascos en un vídeo de David Guetta no quiere decir que luego nos los tengamos que encontrar por la calle, sobre todo si valen lo mismo que un alquiler. No eres un DJ. No eres productor de música. Seguramente ni sepas en qué clave está sonando el CHUNDA CHUNDA ni te importe. ¿En qué momento se te ocurrió que merecías algo más que unos simples cascos para ir por la calle escuchando la música que has descargado gratis?
11. Los pantalones “cagaos”. Mira. Vamos a ser francos. No son necesarios ni estéticos. No eres guay. Aunque si estás bueno, gracias por enseñarnos el culo.
12. La fiebre Apple. ¿Por qué cada vez que Apple va a sacar un nuevo aparato el mundo entero se para y todas las webs te lo cuentan en directo? ¿Acaso cuando salió el walkman lo retransmitieron en el telediario? Ya se está hablando de cuándo va a ver la luz el iphone 5s. Basta.
13. El dubstep. El
dubstep no es música, ¿vale? No lo es. En 2013 los cantantes han de buscar un nuevo género en el que viciar sus canciones, por favor. Ya que no podemos acabar con la fiebre
electropop, al menos que sea el fin del
dubstep en la música comercial.
Andrés G. Menéndez
También te puede interesar