Lo mejor de la vuelta a la rutina, al frío y a los planes caseros son, sin duda, los ratos de manta, luz tenue y un buen libro. Ese momento de comunión donde la relajación y el silencio se dan la mano con las infinitas líneas de nuestro libro favorito y con la imaginación de nuestra mente, son pequeños placeres que, en Vanidad, sabemos disfrutar.
Por eso, te traemos una lista de los mejores libros para los días invernales en los que apetece quedarse en casa. ¿Te unes a nuestro plan?
1. La hora violeta, Sergio del Molino
Galardonado con premios como el Premio Tigre Juan y el Premio Ojo Crítico de Narrativa entre otros, este libro cuenta en primera persona la historia de Sergio y de su hijo, diagnosticado de cáncer. Tan duras como bonitas, así podemos describir las líneas de este libro que te desgarrará por dentro y del que hemos sacado una conclusión clara: no te quedes sin decir “te quiero” nunca a nadie.
2. Todo esto te daré, Dolores Redondo
Todo esto te daré cuenta la historia de un crimen, el de Álvaro, perteneciente a una de las familias pudientes de la Ribera Sacra. Su marido Manuel descubre la rapidez con la que han cerrado el caso cuando acude hasta tierras gallegas a reconocer el cadáver, pero… no está solo en esta historia.
Nogueira, un guardia civil jubilado, y Lucas, un viejo amigo de Álvaro, ayudarán a Manuel a descubrir la verdad sobre este crimen inesperado, y sobre el oscuro secreto familiar. Es la novela negra que necesitas si eres un amante de las mismas.
3. Te odio como nunca quise a nadie, Luis Ramiro
Si eres amante de los libros de la poesía, Luis Ramiro tiene la clave para tus noches perfectas. Te odio como nunca quise a nadie supone el estreno del cantautor madrileño con su primer libro de poemas. Un libro que habla de amores y desamores que traspasan las canciones y se convierten en sonetos, micropoemas y poemas-relato.
4. Sonetos del amor oscuro y otros poemas, Federico García Lorca e ilustraciones de Francisco Asencio
Sonetos del amor oscuro es una de las obras más célebres de Lorca, pero menos conocidas, sobre todo porque fue descubierta póstumamente.
Este fragmento de la obra del granadino hace alusión al “amor oscuro”, es decir, la homosexualidad. El amor del que habla García Lorca en sus versos es extrapolable a ese amor imposible, truncado o difícil, pero que te llena el alma. Algunos de sus versos recitan así: “Esta luz, este fuego que devora. Este paisaje gris que me rodea. Este dolor por una sola idea. Esta angustia de cielo, mundo y hora. Este llanto de sangre que decora lira sin pulso ya, lúbrica tea. Este peso del mar que me golpea. Este alacrán que por mi pecho mora”. Sin duda, son sus versos más desgarradores, pero también los más sinceros del poeta.
5. El tejido de los días, Carlos Aurensanz
El escritor tudelano, conocido por obras como La puerta pintada o la trilogía de los Banu Qasi, nos trae esta vez una novela de amor y misterio digna de estar en nuestra biblioteca personal.
Su historia transcurre en la Zaragoza de 1950, cuando una joven llega embarazada y sola, algo inconcebible hasta entonces. Su taller de costura se convertirá pronto en el favorito de las mujeres adineradas de la ciudad aragonesa. Allí conocerá a la familia Monforte y la vida de los que giran a su alrededor… Pero mientras labra un futuro mejor para su hijo -y esconde el pasado del hombre al que amó-, un oscuro secreto de la familia saldrá a la luz. Te dejará sin aliento.
6. Los peces de la amargura, Fernando Aramburu
El escritor de Patria, uno de los libros más exitosos de la historia de nuestra literatura moderna, nos vuelve a sorprender, pero esta vez con un drama familiar, cotidiano, pero siempre ligado al conflicto terrorista, al fanatismo.
Los peces de la amargura es, en principio, una historia sencilla que poco a poco va desembocando en una elipsis de drama. A modo de crónicas o reportajes, de testimonios en primera persona, de cartas o relatos contados a los hijos, recoge fragmentos de vidas que mucho tienen que enseñarnos.
Ya no tienes excusa para dar la bienvenida a la temporada otoñal con un buen libro...
Héctor Chueca: @hectorchueca
Imágenes: Cortesía de las editoriales