Libertad, igualdad y ¿una buena piel? Si muchos pudieran elegir sus derechos fundamentales, y permitirse ser algo frívolos también, seguramente tener un cutis saludable y luminoso sería uno de ellos. Tener (o más bien cuidar de) una buena piel se ha convertido en otra manera más de demostrar el estatus social. Una manera de atenderse a uno mismo, que se refleja de manera inmediata en la mirada de los demás, nada más poner un pie fuera de casa.

De todos los pasos y cuidados que podemos dar en el camino hacia una epidermis que despierte la envidia del entorno uno de los más repetidos por lo expertos es la limpieza. Apliques o no maquillaje, retirar la suciedad, polución, células muertas, sudor y sebo acumulado durante la jornada debería ser un paso imprescindible antes de irse a dormir. Casi tan automático como lavarse los dientes.

En ese mantra que debería ser la limpieza en tu vida han llegado unos chicos nuevos a la ciudad (cosmética), con novedades que pueden hacer de tu rutina algo placentero y disfrutable. Se trata de los limpiadores con textura lechosa, milky cleansers, una suerte de loción, agua micelar y leche, entendida desde su vertiente más líquida y ligera.

Dejando atrás la tradicional leche que has visto en el tocador de tu madre toda la vida, estos productos resultan más actuales, al tener una consistencia que permite refrescar, hidratar y limpiar en un solo gesto. Con esto no queremos decir que todos los pasos que solías hacer después queden resueltos, pero puede que sea una solución para hacer más completo el cuidado de tu piel. ¿Quieres conocerlos mejor? Descubre algunos de los que hemos probado últimamente y ya han conseguido ganarse nuestro corazón.

Agua micelar con leche hidratante, de Garnier

La gama de aguas micelares de Garnier abarca diferentes tipos adecuados para cada patología cutánea: sequedad, sensibilidad o exceso de grasa. Sin embargo, la que destaca más por su innovadora textura es esta enriquecida con leche hidratante, que le da ese aspecto turbio. Un limpiador eficaz, rápido y fácil de usar para retirar el maquillaje y las impurezas, a la vez que deja confortable y calmada la piel. Todas aquellas personas que encuentren demasiado “inconsistente” las aguas micelares hallaran en esta versión una excelente apuesta, que no deja sensación pegajosa o de tirantez, ni residuos. Perfectamente equilibrada y, al no requerir aclarado, adecuada para las pieles más sensibles.

My Clarins RE-MOVE Leche Micelar Desmaquillante, de Clarins

Dentro de la divertida y juvenil línea My Clarins, ideada para iniciarse en esto del cuidado cosmético con ingredientes de calidad y fórmulas en gran medida basadas en frutas y plantas, esta leche desmaquillante asegura ser un primer paso que delicadamente purifique la piel, a la vez que la hidrate. Ideada para ser usada por la mañana, para que en un solo paso puedas salir de casa con un cutis radiante, gracias a la unión del agua micelar y la leche. Vegana y con fragancia de almendras, contiene extracto de higo y la tan de actualidad moringa para aportar un delicioso toque nutritivo. Puede ser usada en ojos, rostro y labios, así que tendrás aquí un limpiador polivalente apto para las situaciones más apuradas.

Milky Jelly Cleanser, de Glossier

Quién iba a decir que de un exitoso blog de belleza saldría la última marca de cosmética en despertar una auténtica legión de seguidores en todo el mundo. Cada lanzamiento de Glossier causa desmayos a todos los que no logran poner sus manos sobre el mismo y este limpiador de tacto entre lechoso y gelatinoso no ha sido una excepción. Como bien dicen en la marca, este producto es el elegido. Un lavado facial que atina a la perfección en incorporar las últimas tendencias, con una textura a medio camino entre el gel, la leche y la crema, que disuelve el maquillaje y la suciedad para empezar de cero. De esta manera, limpia y acondiciona la piel, especialmente por incorporar los mismos agentes presentes en las soluciones de limpieza de las lentes de contacto: los poloxámeros. Así aseguran ser eficaces y suaves, porque si es bueno para tu ojo lo será para tu piel. Perfecto para dejar en la ducha porque en su caso sí requiere aclarado.

Toleriane Dermo-Nettoyant, de La Roche-Posay

La línea para pieles intolerantes o extremadamente reactivas no podía esquivar la presencia de un limpiador lechoso pensado precisamente para ser lo más suave y respetuoso posible con estos casos extremos. Enriquecido con glicerina y el agua de manantial termal clásico de todos los productos de la marca, este limpiador podría ser el menos moderno en cuanto a textura, pero te aseguramos que resulta súper eficaz una vez retirado con agua o algodón.

Milky Tonic, de Pixi

Qué sería de una limpieza sin el acompañamiento de un buen tónico que redondeé la operación. Este de Pixipuede que no sea tan conocido como su hermano, Glow Tonic, pero te aseguramos que tiene una fórmula excelente, basada en el agua de camomila, con diferentes extractos que no solo dan un aroma rico, sino que aportan vitaminas, omegas y minerales: granos, como la avena y la cebada; flores, como la camelia y la rosa Damascena y frutas, como la naranja, la uva o el limón. Limpia, refresca y, ante todo, calma de manera poderosa la piel, dejándola preparada para recibir todo el cariño posterior en forma de tratamientos.

Berta Almagro - @bertalmagro

Imágenes: cortesía de las firmas