La ex triunfita está que se sale y es que, después de convertirse en la nueva embajadora de Illuminage, el nuevo servicio de color de Wella Professionals, Miriam Rodríguez ha revelado que volverá a La Voz, pero esta vez como coach. Hablamos con ella para que nos cuente qué más tiene entre manos...

¿Cómo ha cambiado tu vida en apenas dos años?

Es evidente que mi vida ha dado un giro de 180 grados a todos los niveles. He intentado que afectara lo menos posible a mi vida personal de “siempre”, aunque a veces es inevitable que todo vaya un poco unido. Podríamos decir que sigo siendo la misma pero con la gran suerte de que ahora puedo dedicarme a lo que me gusta al 100%.

¿Qué te llevó a presentarte en un programa de televisión como Operación Triunfo?

Siempre fui seguidora de OT y tenía claro que si algún día me presentaba a un programa de televisión, sería este... El formato de “Academia” siempre me ha llamado la atención.

Antes de entrar en la Academia, ¿cómo te has ido curtiendo para llegar a ser la artista que eres ahora?

A los 12 años empecé a cantar en los bares... Tuve una banda con 15 años y durante un tiempo estuvimos tocando por los bares de la comarca. Mi padre se encargaba de llevar todo el equipo, lo montábamos todo juntos... Más tarde, empecé a hacer acústicos, solo yo y un guitarrista... y cambié los bares por las bodas. Así fueron pasando los años hasta que me fui a estudiar arte dramático y un año más tarde, me mudé a Madrid.

Me puse a trabajar en una gran cadena textil como dependienta, compartía piso y cuando tenía tiempo libre, me iba a tocar al metro. El resto del tiempo lo invertía en buscar bares donde poder tocar y en enviar mails a productoras, discográficas, oficinas de representación... y creando un videobook que siempre estaba en work in progress (risas).

En tu caso, ¿cómo fue la experiencia en el talent musical? ¿Cómo viviste los últimos días antes de la final?

Honestamente, fue una experiencia que me hizo aprender mucho y al mismo tiempo, creo que es solo para vivir una vez... es algo único. Los últimos días para mí fueron duros, necesitaba volver a casa con mi familia.

¿Qué sensaciones tuviste después de salir de esa burbuja?

Fue todo un shock, no me esperaba para nada lo que estaba pasando. Sentí mucho apoyo, del cual no supe prácticamente nada en todo ese tiempo dentro de la Academia, y eso me hizo mucha ilusión.

¿Cómo reaccionaste cuando te dijeron que iban a confiar en ti para asesorar a Pablo López en La Voz?

Me sorprendió. López confió en mí desde el primer momento y me encantó la idea, aunque sí que es cierto que me daba cierto respeto... Como quien dice, yo acababa de salir de un talent, y entiendo que para algunos es complicado entender que yo estuviera ahí, pero mi posición era clara: única y exclusivamente estaba para apoyar y ayudar en todo lo posible a Pablo y a los concursantes, con los cuales empaticé desde el primer momento y les doy las gracias. Todos me lo hicieron muy fácil y pude disfrutarlo al máximo.

Después de aparecer en una serie tan mainstream como Vis a Vis, ¿repetirías la experiencia?

Sin duda, siempre me gustó muchísimo la interpretación... Fue una gran experiencia y le doy las gracias a todo el equipo por la oportunidad.

¿Fue difícil afrontar y defender tu primer trabajo en solitario?

Afrontarlo quizás sí, todos los comienzos son duros... pero ha sido un año de aprendizaje y madurez para mí. Defenderlo ha sido justamente lo que me ha hecho darme cuenta de muchas cosas. Me considero puramente de directos y tengo la suerte de ir acompañada de una gran banda.

¿Qué personalidad crees que tienen tus canciones?

La misma que yo (risas). Esa mezcla de fuerza con sensibilidad y fragilidad.

En Cicatrices hablas de sentimientos muy personales. ¿Por qué sentiste la necesidad de abrirte así con tus letras?

Pienso que a todo autor le sale hacer eso. Yo escribo sobre lo que me pasa, sobre cómo me siento, sobre lo que veo en la calle o situaciones que vivo y me marcan para bien o para mal. Escribo prácticamente siempre sobre lo que conozco... Es cierto que después cada uno se lleva la canción a donde quiere, y letras que parecen hablar de una cosa, hablan de otra completamente diferente. Eso es lo bonito de escribir y hacer canciones.

De las metas que has ido cumpliendo, ¿cuál ha sido la que más significativa/sorprendente para ti?

Absolutamente todas. Nunca me hubiese imaginado mi vida así.

¿Una curiosidad que no sepamos de ti?

Me gustan los juegos de mesa en familia... Me lo paso muy bien y me río mucho, siempre soy la que tira un: “¿jugamos a algo?” a media tarde.

Tu profesión es una auténtica montaña rusa, ¿en qué momento te encuentras ahora (artísticamente hablando)?

Ahora mismo me encuentro sumergida en el próximo trabajo. En estos últimos meses me fui a Londres a producir algunas canciones con productores que son toda una referencia a nivel musical para mí y con los que tenía muchas ganas de trabajar. Todavía me queda hasta que todo esté como debe estar, pero me he involucrado mucho en la producción y pienso constantemente en los próximos shows. Este año vendrán cosas nuevas que me ilusionan mucho, algo habrá por ahí.

 

Texto: Anna Alarcón @_annalarcon

Vídeo: Elena Martínez @elenamartinezsantos

Imágenes: Cortesía de Wella Professionals