Hay personas que disfrutan limpiando y ordenando la casa, lugar de trabajo o trastero... Y luego estamos nosotras, que ese afán de pulcritud lo aplicamos a nuestro rostro. Mirarse al espejo y encontrar una piel nítida y pura es una satisfacción producto del trabajo bien hecho, algo que además requiere esfuerzo y constancia.

Pero, no tiene por qué ser una tarea tediosa o que despierte pereza (al menos no tanto como cambiar el armario o hacer limpieza en el mismo) porque la oferta cosmética pone a nuestra disposición un abanico de propuestas que hacen del momento un auténtico placer dedicado a una misma.  Aquí nuestros favoritos: 

 

Mousse Nettoyante Peau Neuve, de Clarins

La línea de Clarins se amplió recientemente con la incorporación de una impresionante variedad de desmaquillantes, limpiadores y tónicos para cada momento y condición, enriquecidos con extractos del Domaine Clarins, casi un retiro en los Alpes donde cultivan sus extractos y los combinan en un laboratorio al aire libre. Parece un sueño, ¿verdad? Solo teniendo en cuenta su origen, se entiende cómo deja de bonita la piel esta mousse con extracto de saponaria bio, escualeno vegetal y extracto de tamarindo, el cual además exfolia suavemente para revelar una tez radiante.

Le Gel, de Chanel

Aunque seamos curiosas y nos encante probar texturas para limpiar la piel, un buen gel espumoso, clásico y refrescante, siempre tiene que estar cerca. Este además es refinado y sensorial, libera las impurezas, residuos acumulados de cosméticos y polución de la superficie. Indicado para pieles mixtas y grasas, logra controlar los brillos sin esa sensación de tirantez incómoda gracias a dos extractos marinos, la microalga azul y el extracto de salicor.

Limpiador Capture Totale, de Dior

 

Aunque el limpiador no sea un producto destinado a quedarse, incorporar en ese paso un extra antioxidante nunca está de más. Este es el caso del de Dior, un gel sedoso que crea una espuma densa para retirar las impurezas, pero también hidratar y dejar la piel suave. Incluye extractos de cuatro flores: longoza procedente de los Jardines Dior en Madagascar, peonía, lirio blanco y jazmín.

Pore Cleanser Buster, de Belif

 

Uno de los objetivos mayoritarios del primer paso de cuidado diario son los poros. Sabemos que extraer todas las células muertas, sebo y deshechos que los obstruyen puede llegar a obsesionarte pero, a parte de una limpieza profesional, hay propuestas para tratarlos en casa, como esta disponible en Sephora. Una fórmula con carbón y derivado del coco que desincrusta con la inestimable ayuda de un cepillo con 140.000 cerdas que realizan una exfoliación física de la superficie cutánea.

Agua Micelar Trifásica, de Skintsugi 

 

A veces no se trata de la potencia del producto, sino de ser constante con uno suave como esta micelar a base de agua volcánica. Limpiar mañana y noche es imprescindible, así que para comenzar la rutina vemos perfecta esta opción que contiene ácido hialurónico, perfecto para hidratar la piel y vitamina C, con poder antioxidante. Mejor que aplicar agua fría para despertarte. 

Silky Purfying Mud Soap, de Sensai

 

Hay días en los que te sientes la piel tan fuera de control que no sabes ni por dónde empezar. Esos son en los que debes tener en cuenta este aliado japonés que hace doblete como mascarilla a base de arcilla. Tranquila, no le temas, porque no es nada engorroso... al contrario, en contacto con el agua se vuelve sedoso, deshaciéndose con las saponinas de su fórmula, que impiden que brilles. También contiene extracto de shiso y kanzo (derivado del regaliz) para dejar la piel limpia, pero suave y calmada al mismo tiempo.

Purify Clementine Face Wash, de Apoem

Su dispensador nos parece perfecto para tener en la ducha y es que es el típico limpiador que agarras por la mañana medio dormida y despierta tus sentidos. Para ello utiliza las propiedades de la aromaterapia de la mandarina y árbol de té, que además refinan la textura, controlan la producción de sebo y eliminan las bacterias que estimulan la aparición de granos. También las exfoliantes y regenerantes del kiwi, la naranja y la manzana para salir a la calle con un cutis de 10.

Grapefruit Face Wash, de Malin + Goetz

Un descubrimiento casual en la habitación de un hotel provocó este flechazo instantáneo. Este limpiador práctico y certero está enriquecido con extracto de pomelo y surfactantes del coco que crean una densa espuma que se lleva todo lo que no necesitas sobre tu piel. Su aroma cítrico ya es la guinda en el pastel.

Limpiador Ginzing, de Origins

Esta línea de la firma nos encanta porque despierta hasta la tez más apagada y desvitalizada, así que utilizamos el contorno, la BB Cream y el limpiador no podía quedarse fuera. Exfolia con los microgránulos de café, refresca y aporta luz gracias al ginseng de su formulación. Además, contiene aceite de jojoba que regula la producción sebácea y cera carnauba.

 

Berta Almagro: @bertalmagro

Imágenes: Cortesía de las firmas